El gobierno ampliará las concesiones carreteras por 10, 15 o 20 años a cambio de que las operadoras inviertan en modernizaciones o ampliaciones, dijo José de Luna, titular de la Unidad de Crédito Público de la Secretaría de Hacienda.
"Nosotros tenemos concesionadas muchas de las carreteras y autopistas a empresas privadas y les hemos dicho que vamos ampliar el plazo de la concesión por 10, 15 o 20 años más, a cambio de que inviertan de manera inmediata en la modernización, mantenimiento o incluso en la ampliación de las autopistas y carreteras y con ello estamos reactivando el empleo y además, estamos movilizando la inversión privada en estos sectores", expuso.
El Gobierno mexicano ve en el sector de la construcción a un mitigante del efecto de la crisis que ha causado el coronavirus en México y por ello buscará impulsar al sector a través del otorgamiento de permisos para acelerar las obras en construcción y la ampliación de dichas concesiones.
Para que se reactiven lo antes posible las obras de gran impacto sobre todo a nivel municipal como aeropuertos y transporte masivo en ciudades, el gobierno está acelerando los permisos y autorizaciones .
"El gobierno tiene deliberadamente un grupo de trabajo que está ayudando a acelerar la expedición de permisos para nuevas obras para que (estas) se puedan llevar a cabo y puedan absorber la mano de obra que ha quedado disponible", detalló el funcionario en su participación este miércoles en el panel "Perspectivas Económicas en América Latina: Preparando el terreno para una rápida recuperación", organizado por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE).
Al exponer los sectores estratégicos para la economía mexicana en la fase de reactivación, dijo que hay otros proyectos de infraestructura que no se habían terminado y que requieren la participación del gobierno, como el Tren México-Toluca, dichas obras se están acelerando para que se reactiven a la brevedad.
"Este sector es muy importante porque emplea a un número muy grande de mano de obra, sobretodo mano de obra del sector informal, trabajadores de la construcción, plomeros, electricistas que dependían de la contratación día a día o semanal", apuntó.
De acuerdo con el funcionario, el gobierno de México basa su tercera fase de reactivación económica en cuatro ejes: acelerar el gasto programado -a través de proyectos de infraestructura como el Aeropuerto de Santa Lucía y la Refinería de Dos Bocas-, asegurar que todas las empresas tengan recursos líquidos para hacer frente a todas sus obligaciones; identificar e impulsar sectores con rápido impacto en la economía como la construcción y la exportación y aprovechar el T-MEC.