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La baja en la calificación a la nota soberana y de Pemex por parte de Standard & Poor's debe obligar al Gobierno federal a replantear la estrategia que ha ejercido para la petrolera nacional, coincidieron analistas del sector entrevistados.
La calificadora de riesgo criticó principalmente la estrecha relación entre el gobierno y la compañía, así como el respaldo que ha dado la administración federal a la empresa en sus dificultades financieras.
"Se toma su tiempo para señalar que hay una serie de acciones en la política energética que agravan la situación que está enfrentando el Gobierno federal. Esto debería de forzar una reflexión inmediata sobre cómo se están planteando estos términos, México no puede controlar muchos factores de la pandemia global, pero si puede controlar muchos factores de su política energética y fiscal", dijo Pablo Zárate, managing director de FTI Consulting.
Para los analistas, la baja en la nota representa la última oportunidad para que el gobierno replantee su política energética y analice la viabilidad de sus dos proyectos principales en el sector: la refinería de Dos Bocas y el desarrollo de sus campos prioritarios.
"Esta es la última oportunidad de Pemex para volverse más eficiente y cortar inversión, el gobierno tiene un margen de maniobra mínimo creo que es momento para parar muchas de estas inversiones sin sentido como son la mayoría de los campos prioritarios, como lo es probablemente la refinería es un año, en el cual compañías petroleras están cuidando su capital a toda costa aún cuando eso implica sacrificar producción", opinó Pablo Medina, vicepresidente de Welligence Energy Analytics.
"El contexto actual ha puesto en evidencia las debilidades del programa y del apoyo a Pemex, lo que se ha dicho: que no es rentable no invertir en exploración y producción, invertir en un refinería, enfocarse en una producción volumétrica en lugar de rentabilidad", coincide Adrián Calcaneo, de IHS Markit.
De acuerdo con un análisis la consultora Welligence, sólo el 30 por ciento de los campos actuales de Pemex son rentables en el entorno actual en el que el precio del petróleo muestra caídas considerables.
Standard & Poor's redujo el jueves en un escalón la calificación soberana de México en moneda extranjera de 'BBB+ a 'BBB', y la puso en perspectiva negativa, ante el impacto del coronavirus y la caída en los precios del petróleo, factores que mermarán el crecimiento de la economía.
La agencia también recortó la nota crediticia de Pemex, a 'BBB', lo que refleja la estrecha relación con la nota soberana y el seguro respaldo del gobierno a la empresa en caso de dificultades financieras. En ambos casos están a dos escalones del grado especulativo.