Goldman Sachs prevé que este año el Producto Interno Bruto (PIB) de México se contraerá 9.8 por ciento.
Su estimación anterior publicada en mayo era de una caída de 8.5 por ciento.
"Esperamos una fuerte contracción del PIB real en 2020 (9.8 por ciento) dada la caída muy significativa de la demanda externa de bienes y servicios mexicanos (recesión global), los menores precios de las materias primas y el severo impacto en la demanda interna por las medidas de distanciamiento para hacer frente al brote de COVID-19" comentó Alberto Ramos, economista en jefe de Goldman Sachs para América Latina.
El ajuste se da luego de que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) publicara los más recientes datos de la oferta y demanda global de bienes y servicios, donde el consumo privado cayó 19.4, al mismo tiempo que la formación bruta de capital fijo se contrajo 29.8 por ciento, ambos a tasa trimestral en el periodo de abril a junio de este año.
"La actividad durante el 2T20 se vio fuertemente afectada por la severa caída de la demanda externa impulsada por la pandemia de Covid y los protocolos y medidas de distanciamiento social que suprimen la demanda interna para limitar el movimiento y la actividad", aseveró Ramos.
El directivo añadió que "a comparación de otros pares latinoamericanos, la respuesta de las políticas macroeconómicas de México ha sido decepcionante".
Ramos reconoció que el Banco de México (Banxico) anunció un paquete integral de medidas para respaldar el crédito y la liquidez del sistema financiero, no obstante, sigue manteniendo una de las tasas de interés más altas dentro de los mercados emergentes.
"El Banco Central anunció un paquete integral de medidas para respaldar el crédito y la liquidez del sistema financiero, pero ha sido notablemente conservador en la calibración de la política monetaria; con un 4.5 por ciento, México todavía tiene una de las tasas de política monetaria nominal y real más altas de los mercados emergentes", sostuvo.