La importación de camarón proveniente de Honduras y de Ecuador, así como la falta de apoyo económico por el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador están debilitando a la industria camaronera del país, dijo Luis Campos González, presidente de la Asociación de Acuacultores del municipio de Ahome, Sinaloa.
"Además, la importación de productos, como el camarón, ha derivado en que ingresen enfermedades a territorio mexicano que no son endémicas de nuestros país, no estamos en contra de que se importe, pero primero que se consuma lo nacional y ya después si no alcanzamos a cubrir la demanda, que se importe", señaló Campos.
"Un camarón de unos 30 gramos se está pagando a 90 pesos, pero su costo de producción oscila entre los 85 y 90 pesos por lo que casi casi se está vendiendo al costo", resaltó.
En el marco de la inauguración del Congreso de Acuacultura de Camarón 2019, el dirigente comentó que se necesita una inversión de alrededor de 200 millones de pesos para electrificar las granjas de camarón del norte de Sinaloa, con el objetivo de poder doblar la producción y reducir sus precios, ya que de otra forma, es imposible competir contra otros mercados.
"El gobierno de la 4T no está protegiendo al sector primario, estamos peor que años anteriores", apuntó el dirigente de acuacultores.
La semana pasada, el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) para 2020 reveló que el presupuesto al campo será inferior en 27 por ciento al de 2018.
"No pedimos que nos regalen nada, los acuacultores estamos acostumbrados a trabajar, pero de nada nos sirve que nos bajen 2 o 3 pesos en los precios del diésel, necesitamos electricidad en las granjas para poder mejorar la producción y generar empleos", dijo González.
El presidente de la Asociación de Acuacultores ve el 2020 como un año complicado no solo para su sector productivo, sino para todo el sector primario.
Actualmente, México es el tercer lugar en Latinoamérica en producción de productos acuícolas y de pesca, según datos de la Conapesca, además de que genera alrededor de 295 mil empleos directos, y al menos 1.5 millones de personas están relacionadas con el sector