Francia reaccionó con furia este martes ante la amenaza de Estados Unidos de aplicar aranceles de 100 por ciento sobre quesos, champaña y otros productos de esa nación.
El presidente francés Emmanuel Macron advirtió a su contraparte estadounidense, Donald Trump, que la medida sería un ataque a toda Europa.
"Veremos a dónde van las discusiones en las próximas semanas, pero habrá una respuesta europea", apuntó el mandatario francés en un encuentro con Trump al margen de la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en Londres.
"Porque, en efecto, la sancionada o atacada no sería Francia, sino Europa", subrayó.
Macron y su ministro de Hacienda advirtieron que habrá una respuesta europea si Washington aplica esa medida.
El representante comercial estadounidense propuso aplicar los gravámenes sobre productos franceses con un valor de 2 mil 400 millones de dólares en represalia por un impuesto francés a los gigantes tecnológicos Google, Amazon y Facebook.
Macron remarcó que "no es justo" que los impuestos sobre los ingresos digitales sean inferiores que sobre los ingresos reales. Sostuvo que no se debe individualizar a Francia por tratar de corregir ese desequilibrio con un impuesto a las firmas tecnológicas.
"Mi primera pregunta es qué sucederá con Reino Unido, que aprobó el mismo impuesto. Con Italia, el mismo impuesto. Austria, España...", dijo Macron. "Si somos serios, esos países deberán recibir el mismo trato".
La medida probablemente incrementará las tensiones comerciales entre Estados Unidos y Europa. Trump señaló que la Unión Europea debe "ponerse en forma o en caso contrario, la cosa se pondrá muy difícil".
"No estoy enamorado de esas empresas (tecnológicas), pero son empresas nuestras", afirmó Trump antes del encuentro con Macron.
El ministro de Hacienda francés, Bruno Le Maire, dijo que la amenaza estadounidense es "simplemente inaceptable. No es la conducta que esperamos de Estados Unidos hacia uno de sus principales aliados".