Los ingresos del Gobierno federal por la venta de petróleo se desplomaron 41.9 por ciento en el periodo enero-abril de este año, una cifra sin precedentes en los registros de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
De acuerdo con el informe mensual de finanzas públicas de la SHCP, hasta el cierre de abril el Gobierno recibió 157 mil 658 millones de pesos de ingresos petroleros. En el mismo periodo del año pasado, el monto fue 263 mil 415 millones.
Los registros de Hacienda de los ingresos petroleros inician en 1990 y en ningún año posterior a ese se observa una debacle como la de 2020.
La mayor caída previa en esos ingresos fue en 2009, en medio de la crisis financiera detonada un año antes, y que generó un desplome de 34.8 por ciento.
En abril de este año se dio una guerra de precios en el mercado de crudo, impulsada principalmente por las diferencias entre Arabia Saudita, Rusia y Estados Unidos, los principales productores globales, que mandó algunos contratos de futuro de petróleo a terreno negativo.
Pasaron semanas antes de que se lograra un acuerdo que moderara la producción, y con ello, los precios de los energéticos repuntaran nuevamente.
Sin embargo, tal y como revelan las cifras de la SHCP, el daño estaba hecho.
Según el detalle del informe de la dependencia, los ingresos de Petróleos Mexicanos (Pemex) también tuvieron un retroceso sin precedentes de 47.5 por ciento, que debilita aún más su posición frente a las calificadoras de riesgo y elevan sus costos de financiamiento.