A más tardar este 30 de septiembre, el gobierno de Estados Unidos entregará al de México la primera información de los ciudadanos mexicanos con cuentas en instituciones financieras en ese país que recibieron más de 10 dólares en intereses el año anterior.
A su vez, México enviará a Estados Unidos la información de residentes estadounidenses con cuentas o inversiones en instituciones mexicanas por más de 50 mil dólares en el caso de personas físicas, o arriba de 250 mil dólares cuando se trate de personas morales.
Con ello, se dará cumplimiento al acuerdo intergubernamental celebrado en 2012 entre México y Estados Unidos para intercambiar información bancaria y financiera, con el propósito de verificar el cumplimiento de las obligaciones fiscales de sus respectivos contribuyentes.
Dicho acuerdo busca mejorar el cumplimiento fiscal internacional con respecto a la Ley sobre el Cumplimiento Fiscal relativa a Cuentas en el Extranjero (FATCA, por sus siglas en inglés), aprobada por el Congreso de Estados Unidos en marzo de 2010.
El objetivo de la Ley FATCA es que Estados Unidos obtenga información de las cuentas o inversiones de sus ciudadanos en entidades financieras en el extranjero, a fin de identificar si cumplen con sus obligaciones fiscales en su país y evitar la evasión de impuestos.
Para ello, el gobierno estadounidense solicitó la colaboración de las entidades financieras extranjeras, mediante acuerdos con su Servicio de Rentas Internas (IRS, por sus siglas en inglés), pero las que no proporcionen esta información serán sancionadas con 30 por ciento de impuesto de retención sobre cualquier pago que sea fuente de riqueza en Estados Unidos.
Gobiernos de muchos países han aceptado colaborar con Estados Unidos con la firma de acuerdos específicos, a fin de que el intercambio de información se haga a través de los organismos recaudadores de cada país y con ello evitar violaciones al secreto fiscal.
Así, el 19 de noviembre de 2012, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y el Departamento del Tesoro de Estados Unidos firmaron un acuerdo intergubernamental para el intercambio automático de información, a través del IRS y el Servicio de Administración Tributaria (SAT) de México.
De acuerdo con las fechas establecidas en el acuerdo, el 15 de septiembre de este año venció el plazo para que las instituciones financieras mexicanas reportaran al SAT la información sobre las cuentas o inversiones de ciudadanos estadounidenses en México.
A más tardar el 30 de septiembre próximo, el SAT de México y el IRS de Estados Unidos deben llevar a cabo el intercambio automático de información de las cuentas o inversiones de los ciudadanos de estos países en instituciones financieras que operan en sus respectivos territorios.
Autoridades del SAT informaron que 203 instituciones financieras en México cumplieron con reportarle la información financiera de estadounidenses en el país, es decir, menos de 60 por ciento de las obligadas, la cual será intercambiada con el IRS de Estados Unidos este 30 de septiembre.
En entrevista, el administrador central de Grandes Contribuyentes del SAT, Óscar Molina Chie, afirmó que el organismo recaudador mexicano ya está preparado para cumplir con enviar a Estados Unidos esta información en la fecha límite.
También el 30 de septiembre, agregó, recíprocamente Estados Unidos empezará a mandar vía electrónica a México las primeras informaciones sobre mexicanos que tienen inversiones y rendimiento financieros en ese país.
Una vez recibida dicha información, el SAT iniciará un análisis de riesgo para clasificarla e iniciará auditorías en aquellos casos que los filtros detecte a mexicanos con cuentas en Estados Unidos que no están pagando impuestos en México, incluso este mismo año en caso evidentes de incumplimiento.
"El hecho de que un mexicano tengo inversiones en Estados Unidos, per se no quiere decir que ya dejó de pagar impuestos", subrayó Molina Chie.
No obstante, precisó, el SAT hará una revisión profunda de la información que reciba y en los casos que detecte alguna incongruencia enviará cartas invitación a los contribuyentes mexicanos para que las expliquen y, en su caso, iniciará auditorías.
Ante el alto número de mexicanos que viven en Estados Unidos, muchos de los cuales tienen servicios bancarios, consideró que México recibirá una cantidad indeterminada de reportes de quienes tienen cuentas o inversiones en ese país.
El funcionario del SAT indicó que Estados Unidos reportará a México cuentas de ciudadanos mexicanos que hayan obtenido más de 10 dólares en intereses en el año inmediato anterior.
Esta información incluirá nombre, dirección, Registro Federal de Contribuyentes (RFC), número de cuenta, nombre y número de identificación de la institución financiera, monto bruto de intereses pagados, monto bruto de dividendos y monto bruto de otros ingresos.
Por su parte, México reportará a Estados Unidos información de residentes estadounidenses con cuentas cuyo saldo o valor exceda 50 mil dólares en el caso de personas físicas, y superiores a 250 mil dólares cuando se trate de personas morales.
Esta información será nombre, dirección, número de identificación fiscal, número de cuenta, saldo promedio mensual o valor de la cuenta, nombre y número de la institución financiera, saldo promedio mensual de la cuenta, monto bruto total de intereses, dividendos y cualquier otro ingreso.
Resaltó que el acuerdo de intercambio de información con Estados Unidos incrementa la percepción de riesgo de los contribuyentes mexicanos respecto a que, aunque tengan su dinero fuera del país y no pagan impuestos por ello, se les puede detectar relativamente fácil y, en consecuencia, podría aumentar la recaudación.
"Esto incrementa la percepción de riesgo que por muy lejos que se vayan no van a estar en el anonimato, los podemos identificar y creo que eso contribuye para que los contribuyentes pienses seriamente en aquellos casos en que quieran evadir el pago de impuestos en México", subrayó.
Añadió que México está a la vanguardia en materia de intercambio de información financiera a nivel internacional y se ha tomado muy en serio su colaboración con las instituciones y gobierno de Estados Unidos, que están comprometidos en mandar la información de mexicanos que pudieran tener inversiones fuera del país.
El integrante de la Comisión Fiscal del Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP), Víctor Manuel Pérez Ruiz, resaltó a su vez que México es uno de los países con mayor intercambio de información, pues además del acuerdo con Estados Unidos, ha firmado números tratados para evitar la doble tributación o compartir información.
Señaló que México también participará en el programa piloto de intercambio de información auspiciado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), de la cual es miembro, que iniciará en 2017, con lo que se ubica entre los países con las mejores prácticas en esta materia.
"México se coloca a la vanguardia entre los países con más acuerdos y el SAT tiene más elementos para obtener información y validar o verificar si los residentes en México están declarando adecuadamente sus inversiones en el extranjero", subrayó.
Apuntó que a partir de la información que reciba este 30 de septiembre, el SAT podrá verificar si los mexicanos con cuentas o inversiones en Estados Unidos presentaron o no esta información en sus declaraciones de impuestos.
De no haberlo hecho, advirtió, el organismo fiscalizador mexicano podrá iniciar, incluso en este año, el envío de cartas invitación, requerimientos, así como realizar visitas domiciliarias e iniciar auditorías para verificar el cumplimiento adecuado de las obligaciones fiscales.
Aclaró que aquellos cuentahabientes o inversionistas mexicanos en Estados Unidos que reportaron estar al corriente con sus obligaciones fiscales en México no deben preocuparse por el inicio de este intercambio de información.
"No debería de ser una sorpresa (esta intercambio de información con Estados Unidos), pero cada caso debe de analizarse de manera independiente, pero si no han declarado, es algo que debería preocupar a los contribuyentes", expresó.
Pérez Ruiz comentó que desde hace mucho tiempo, cuando empezó la implementación de la Ley FATCA, los contribuyentes mexicanos se acercaron con sus contadores para definir si sus inversiones califican en los regímenes fiscales preferentes o determinar la mejor forma de pagar sus impuestos.
Opinó que el intercambio de información financiera es positivo para México, porque el gobierno tendrá ahora mayores elementos para fiscalizar a los residentes para efectos fiscales en México.
Ello debe ser motivo para que este tipo de contribuyentes se acerque con sus contadores, a efecto de verificar que están cumpliendo de manera adecuada con sus obligaciones y si no, que se pongan al corriente, añadió.