Los empresarios podrán, luego de siete décadas, construir y operar ductos y terminales de almacenamiento para petrolíferos -como gasolinas y diésel-, petroquímicos y gas natural.
Hoy la totalidad de los ductos y terminales de almacenamiento son de Pemex, pero ahora habrá empresas privadas que podrán dar estos servicios.
Esto abre un mercado que tiene una saturación de 80 por ciento tanto en transporte como en almacenamiento de ductos, según información de la CRE. En el sector de midstream que integra transporte y almacenamiento hay oportunidades valuadas en 17 mil millones de dólares en los próximos cinco años, que ahora se podrán aprovechar.
Lo anterior queda listo luego de que el Pleno del Órgano de Gobierno de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) aprobara ayer tres reglamentos: Disposiciones Administrativas de Carácter General en Materia de Acceso Abierto y Prestación de los Servicios de Transporte por Ducto y Almacenamiento de Petrolíferos y Petroquímicos; lo mismo para Gas Natural; y para Distribución por Ducto.
Para construir un ducto nuevo o una terminal de almacenamiento lo primero que tendrán que hacer los nuevos operadores será una temporada abierta. Esto en términos simples, es preguntar a posibles interesados quién quisiera utilizar el ducto o terminal para calcular la capacidad necesaria.
Luego deberá enviar a la CRE el proyecto incluyendo costos de desarrollo, las tarifas que planea cobrar y la ganancia. La CRE aprueba o no el proyecto y así se determinan las tarifas para este tipo de servicios.
Montserrat Ramiro, comisionada de la CRE, explicó que con este elemento se cierra el ciclo de legislaciones pendientes para que desde este año (en cuanto se publique en el Diario Oficial de la Federación la próxima semana) opere el mercado de líquidos bajo un régimen nuevo en el que los privados podrán llevar a cabo actividades que antes sólo le eran permitidas a Pemex.
"Estas disposiciones constituyen uno de los instrumentos regulatorios más importantes para definir y precisar la manera en la que operará el mercado de líquidos en México, el objetivo que persiguen es proveer un piso parejo para todos los potenciales participantes en este mercado que estuvo reservado al monopolio estatal por décadas", dijo Ramiro.