BUENOS AIRES.- Funcionarios de Argentina y México alcanzaron hoy un acuerdo bilateral a cuatro años que permitirá el libre comercio de automóviles y autopartes por 575 millones de dólares en los primeros doce meses, cifra que se expandirá en años siguientes, dijo una fuente del Gobierno argentino familiarizada con la negociación.
El nuevo acuerdo -que fue confirmado, sin detalles, por un comunicado del Ministerio de Industria argentino- se firmaría la semana próxima, cuando vence un convenio del 2012 que establecía un comercio administrado entre ambas naciones con un tope de alrededor de 600 millones de dólares para el sector automotriz.
"(El cupo) va a ir subiendo a casi 640 millones de dólares para el cuarto año. El segundo serían poco más de 590 millones y en el tercero más de 610 millones de dólares", dijo la fuente bajo condición de anonimato.
Las operaciones que superen a esos montos podrán resultar exentas de impuestos de acuerdo con un sistema de "1 a 1", por el cual cada país podrá exportar libremente un dólar por cada dólar importado, añadió la fuente.
El nuevo acuerdo es un alivio a una cuestión conflictiva para ambas naciones, ya que México establece un arancel del 20 por ciento y Argentina del 35 por ciento para las importaciones del sector automotriz.
Participaron de la reunión de hoy Francisco de Rosenzweig, subsecretario de Economía de México y Horacio Cepeda, Secretario de Planeamiento Industrial del Ministerio de Industria argentino.
"Las partes acordaron las bases para modificar el Acuerdo de Complementación Económica 55 (ACE 55) y mantener el flujo de comercio bilateral libre de aranceles en materia automotriz, mediante un esquema de cupos y de intercambio compensado", afirmó la cartera industrial argentina en una nota de prensa.
Según la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa) de Argentina, las exportaciones de vehículos disminuyeron un 6.8 por ciento interanual en febrero.
Recientemente, el Gobierno acordó aumentar el cupo de dólares disponible para las importaciones de la industria automotriz con el fin de reactivar al sector, golpeado por las restricciones impuestas a las compras de autopartes al exterior y por el rígido control cambiario vigente en la nación austral.
El pasado martes, una fuente dijo que México está dispuesto a mantener por hasta dos años más el sistema de cuotas crecientes de importación de vehículos con Brasil, en medio de la presión del gigante sudamericano para evitar el regreso al libre comercio automotor desde el 19 de marzo.