El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar Lomelín, señaló que pese a las oportunidades de negocios que hay en el país, falta la tranquilidad para invertir.
"El país está lleno de oportunidades, lleno, llenisísimo, nos falta tener esa tranquilidad de no estar cambiando las reglas, de tener orientación estable en el manejo de nuestras decisiones y el tener una mejor orientación de nuestras políticas públicas", dijo en entrevista para el programa La Silla Roja de El Financiero Bloomberg TV.
"Nuestros números de inversión no están creciendo para nada, es más, vienen con caídas muy importantes desde antes de la pandemia, el esfuerzo que hicimos en el CCE de crear el Plan de Infraestructura era para tratar de orientar mucho mejor los esfuerzos públicos y privados", agregó.
El representante de la iniciativa privada en México destacó que la confianza es un elemento esencial para generar sólidos cimientos al momento de atraer inversión.
"Nadie va a invertir en un lugar donde las reglas con las que decidió invertir van a cambiar constantemente, nosotros hemos insistido por años que en México se tiene que asegurar una mayor certeza en la legalidad", señaló.
Asimismo, agregó que los países con mayor crecimiento en el mundo son los que proporcionan estabilidad para invertir, "son los que ofrecen tranquilidad al inversionista de que no van a ser sujetos a un cambio por los vientos políticos", aseveró.
En este sentido, agregó que actualmente México está aplicando las leyes con una serie de criterios que son definidos por los políticos de la actual administración y no por la estructura de la legalidad.
"A México tendría que estarle yendo mucho mejor, somos un gran país exportador, pero solo el 28 por ciento de lo que vendemos tiene contenido nacional, esto es una mala noticia, pero podemos convertirlo en una magnífica oportunidad si mejoramos nuestra política industrial, lo que representaría oportunidades increíbles de inversión para los mexicanos", resaltó.
“Nos hubiera gustado ir”
Carlos Salazar consideró que hace falta diálogo entre el sector público y privado, así como 'ponerse en los zapatos del otro' para encontrar soluciones que vayan en beneficio del país, en las cuales sean tomados en cuenta como representantes de las empresas del país.
"Requerimos trabajar en conjunto con las autoridades y con nuestros socios comerciales de Estados Unidos y Canadá, pero para la visita que realizará el presidente López Obrador la próxima semana a Washington no estamos convocados", apuntó.
El sector privado prevé que la visita del presidente a la Casa Blanca será muy diferente en comparación de otras visitas de Estado, ya que debido a la forma en la que la pandemia ha sacudido a Estados Unidos, las reuniones cara a cara con representantes de aquel país se reducirán al mínimo.
"Va a ser una visita especial y diferente, seguramente el único contacto será cuando el presidente López Obrador y Donald Trump se reúnan en la Casa Blanca, nos hubiera gustado ir, siempre es bueno tener el contacto, y más ahora, que nuestra nueva relación comercial, que comenzó con la entrada en vigor del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), apenas inicia", expresó.
“Me equivoqué”
Carlos Salazar reflexionó que a principios de año visualizaba que 2020 sería un año "magnífico para el país", pero que se equivocó.
"Me equivoqué porque me basé en tres aspectos fundamentales, primero, que estábamos firmando el T-MEC; en un segundo lugar, que habíamos logrado una negociación salarial inédita para el país promovida por empresarios y trabajadores, que permitiría el incremento del consumo y finalmente, que teníamos un gran Plan de Infraestructura, al que solo le faltaba un capítulo, el de energía, (pensábamos que con ello) movilizaríamos al país", describió.
El líder empresarial pensaba que juntando los factores de consumo, salarios, inversión y un sector externo al alza, la demanda agregada crecería, y que en consecuencia, el Producto Interno Bruto (PIB) del país aumentaría, pero no fue así.