NUEVA YORK.- El recorte al presupuesto anunciado la semana pasada equivalente a 0.7 del Producto Interno Bruto (PIB) muestra que la prudencia fiscal es prioridad para México, dijo hoy la banca de inversión Merrill Lynch.
El banco con sede en Nueva York consideró que el recorte al gasto, provocado por la caída en los precios del petróleo registrados en los últimos siete meses, "manda una potente señal de responsabilidad fiscal, reforzada por un déficit fiscal menor al esperado en 2014".
Señaló que los recortes al presupuesto de Pemex y de la Comisión Federal de Electricidad eran esperados en México, pero el anunciado al gasto público resultó más sorpresivo debido a que el gobierno mexicano cuenta con coberturas para los precios del petróleo en 2015.
"Los recortes eran esperados hasta 2016. (Aunque) vemos como positivo que el gobierno decidiera actuar de manera preventiva", añadió el banco.
El informe explicó que el efecto de la baja de los precios del crudo, que acumulan una caída cercana al 60 por ciento en los últimos meses, tendrán un efecto mínimo en los ingresos del gobierno mexicano en 2015, debido a las coberturas y al fondo de estabilización.
La baja en los precios del crudo reducirán los ingresos del gobierno en 2016 entre 0.6 y 2.0 por ciento del PIB, con un estimado de Merrill Lynch de 1 por ciento, aunado a una baja prevista en la producción petrolera.
Merrill Lynch estimó que el precio de la mezcla mexicana de crudo se ubicará en promedio en 52 dólares por barril para el año 2016, mientras que en la actualidad se ubica en alrededor de 40 dólares.