Las amenazas del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer impuestos y aranceles a las remesas en Guatemala el mes pasado impulsaron los envíos de dinero a su segundo registro más alto del que se tienen datos.
Los guatemaltecos que viven principalmente en Estados Unidos enviaron a casa 948 millones de dólares en julio, 15.8 por ciento más que hace un año.
El presidente del Banco Central, Sergio Recinos, señaló que la amenaza de Trump llevó a los guatemaltecos en EU a enviar dinero antes de la posible imposición de un nuevo impuesto.
Desde entonces, la institución ha revisado su proyección para el crecimiento de las remesas en 2019 a un rango de entre 9.5 y 12.5 por ciento, desde 7.5 a 10.5 por ciento previamente, agregó.
"Ahorita se esta dando un impacto positivo que probablemente se debe a eso", informó Recinos durante una entrevista en la ciudad de Guatemala. El bajo desempleo en EU también ha sido una bendición para los migrantes, señaló.
La economía de Guatemala probablemente crecerá 3.4 por ciento este año y entre 3 y 4 por ciento en 2020, impulsada por la construcción y la industria financiera, mientras que la inflación se mantendrá dentro de la meta del banco del 3 al 5 por ciento, explicó el presidente.
El déficit fiscal de Gobierno se ampliará a 2.1 por ciento del PIB este año desde el 1.8 por ciento del año pasado.
El Gobierno saliente de Guatemala firmó un acuerdo de tercer país seguro con EU en julio que podría obligar a Guatemala a recibir inmigrantes principalmente de El Salvador y Honduras que huyen hacia el norte, pacto criticado por el presidente electo, Alejandro Giammattei. Si bien los detalles del acuerdo aún no se han concretado, Recinos advirtió que hasta 2 mil 500 migrantes al año podrían refugiarse en Guatemala.
Estos migrantes terminarán compitiendo con los guatemaltecos por empleos, pero la economía tiene capacidad para absorberlos, agregó. Sin embargo, el presidente del Banco Central enfatizó que si la cifra supera los 50 mil, se podría convertir en un lastre para las finanzas.
Recinos dijo que hay margen para que el nuevo Gobierno aumente el gasto y recomendó que la nueva administración lleve a cabo una reforma fiscal para impulsar la recaudación de impuestos de alrededor de 10 por ciento del PIB para aumentar el desarrollo.