La implementación de la nueva ley de la industria eléctrica conllevará a una reforma fiscal una vez que pase el proceso electoral de junio de este año, ya que los recursos públicos actuales son insuficientes para absorber los mayores costos, señaló Gustavo Madero, presidente de la Comisión de Economía del Senado de la República.
"Deberá haber una reforma fiscal después de las elecciones porque las finanzas públicas son insostenibles. Estamos haciendo más grande el problema, el sector público no va a tener dinero y esto obliga a analizar la reforma fiscal y es preocupante por los conceptos que maneja este gobierno, ideologizados y politizados", dijo.
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Con el estimado de mayores costos de producción de la energía eléctrica de 60 mil millones de pesos anuales, se afecta a los precios de energía, la productividad de empresas y familias o aumentará el subsidio y se quitará dinero para el gasto de otros programas sociales, afirmó el legislador en su participación durante el foro Electricidad para el Futuro, organizado por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
El legislador adelantó que el bloque de senadores que se opuso a la aprobación de la iniciativa propondrá una acción de inconstitucionalidad, que procede para que la Suprema Corte de Justicia de la Nación determine si esta viola la Constitución.
"Se necesitan más de 43 senadores para presentar el recurso y sí nos alcanza", dijo Madero.