La percepción de los mexicanos sobre la marcha de la economía del país y de sus hogares se deterioró por cuarto mes consecutivo, lo que representó su mayor racha negativa desde 2013.
El Indicador de Confianza del Consumidor (ICC) se ubicó en 44.2 puntos en junio, con lo que presentó un retroceso de 0.6 puntos respecto a mayo y además se ubicó en su menor nivel en siete meses.
A tasa anual este indicador registró un crecimiento de 6.7 puntos, la menor variación en los últimos siete meses, según los registros del INEGI.
De acuerdo con José Luis de la Cruz, director general del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC), la confianza de los consumidores se ha visto afectada por varios factores coyunturales, como el declive en la inversión, y un menor dinamismo de las ventas minoristas y del crédito bancario, que está disminuyendo de manera importante, lo que ha limitado la compra de bienes duraderos, como automóviles o electrodomésticos.
"Además seguirán siendo temas de preocupación la desaceleración del ritmo de creación de empleos y que no haya inversión pública", mencionó el especialista.
Para analistas de Grupo Financiero Invex, el descenso del indicador es una muestra de que los consumidores sienten inseguridad sobre la estabilidad de sus ingresos, lo que podría derivar en cambios sobre sus decisiones de consumo.
"Los consumidores podrían tener un mayor nivel de ahorro, lo que podría tener efectos directos sobre el consumo y posteriormente sobre la economía real", indicaron en un reporte.
Los analistas consideraron que los factores que han incidido sobre la visión negativa de los consumidores son los menores niveles de gasto público, la disminución sobre la inversión privada, las decisiones políticas sobre temas migratorios y la forma de conducir las relaciones comerciales entre México y Estados Unidos.
El ICC presentó un crecimiento histórico en julio pasado, tras el triunfo de Andrés Manuel López Obrador en las elecciones, y el buen ánimo de los consumidores continuó impulsando este indicador hasta un nivel récord de 48.6 puntos en febrero de este año.
Sin embargo, el 'espaldarazo' de confianza a la economía por parte de los hogares comenzó a desvanecerse un mes después y actualmente el ICC se encuentra en el mismo nivel con el que comenzó el actual gobierno.
Escépticos sobre el futuro
La percepción sobre la situación económica del país dentro de 12 meses respecto a la actual cayó 2 puntos, lo que ubicó a su respectivo indicador en los 49.8 puntos, su nivel más bajo desde diciembre de 2018.
Al interior de los hogares también se observaron menores niveles de confianza, ya que al preguntarles su percepción sobre su situación económica para el próximo año (respecto a la actual), se observó una disminución de 0.7 puntos, estableciendo al indicador en 56.5 unidades.
La tendencia a la baja que han mostrado estos dos indicadores durante los últimos cuatro meses también se reflejó en las posibilidades de los miembros del hogar de realizar compras de muebles, televisores, lavadoras u otros aparatos electrodomésticos, al registrar una contracción de 1.5 puntos, fijando al indicador en los 24.6 unidades.
A pesar de la trayectoria descendente en el índice de confianza, Janneth Quiroz, subdirectora de análisis económico de Grupo Financiero Monex, indicó que el indicador se mantiene en niveles elevados, y, en su comparativo anual, el dato sigue mostrando fortaleza, pero mencionó que la incertidumbre generada por los recortes a las expectativas de crecimiento del PIB de 2019 podría continuar afectando el sentimiento de los consumidores.