La mayoría de los primeros trabajadores que entraron al Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) con cuentas individuales en las Afores no llegarán con los ahorros necesarios para tener una vejez digna, por ello los seguros de rentas vitalicias se han vuelto una alternativa.
Dichos seguros podrán garantizar el pago de un flujo a partir de una edad, periodo, o cantidad mensual determinada, según Carlos Islas, vocero de Rentas Vitalicias de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS).
Islas detalló que de las 106 compañías que operan en el país con licencia, apenas tres tienen productos de este tipo.
"Yo no tengo duda de que en muy pocos años el seguro de anualidades, o rentas vitalicias, habrá de convertirse en uno de los más populares del país. Hoy es poco difundido. No hemos llegado a esa instancia (de necesitarlos con urgencia) pero, el golpe que está por venir con las jubilaciones les hará reaccionar", indicó.
Según la organización empresarial, tres de cada diez mexicanos que llegan a la edad de jubilación obtienen el IMSS, el ISSSTE o una familia extendida que les va a mantener.
Además, señaló que las generaciones que vienen no se casan o tienen uno o dos hijos, por lo que no va haber manera de que los mantengan, por lo que van a enfrentar un problema "gravísimo" y entonces los seguros se van a volver sumamente populares, explicó el ejecutivo en entrevista.
En Estados Unidos, el seguro de rentas vitalicias es el que más se vende. En este sentido, en Asia se está experimentando un boom, debido a que las aseguradoras podrán garantizar flujos mensuales en la vejez, de por vida, por algunos años, como el usuario decida.
Las aseguradoras solo necesitan permiso de la Comisión Nacional de Seguros y Fianzas (CNSF) para que las que ofrecen productos personales tengan la autorización, la cual no debe extender del año, comentó Islas.
De acuerdo con aseguradoras que venden este tipo de productos, los trabajadores pueden contratar una póliza única, así como pólizas extraordinarias, que garanticen un ingreso fijo hasta el fallecimiento, e incluso, después de ese momento, los familiares podrían continuar recibiendo, por un periodo determinado, la pensión del asegurado.