Una vía para aumentar el ahorro de los trabajadores es integrar los fondos de vivienda a las Afores, pues la iniciativa enviada por el Ejecutivo al Legislativo para reformar la Ley del Sistema de Ahorro para el Retiro carece de impacto, ya que no erradica el bajo ahorro, afirmó el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
El dictamen de reforma a la Ley del Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR) que aprobó la Comisión de Hacienda y Crédito Público de la Cámara de Diputados la semana pasada sólo se enfoca en aumentar los rendimientos de los ahorros de los trabajadores, sin atacar el problema de fondo, que es el bajo ahorro que se invierte para generarlos, sentenció Alejandra Macías Sánchez del CIEP.
La directora de investigación del CIEP explicó que una posible vía que sí tiene como objetivo aumentar el ahorro de los trabajadores, pero que no se incluye en la iniciativa (que falta que se discuta en el pleno), es integrar la cuota que aporta el patrón para vivienda al monto administrado por las Afores.
"Esto es para los trabajadores privados 5 por ciento de su salario. Esta acción representaría aumentar la cuota de ahorro de un 6.5 a un 11.5 por ciento y sería una opción para aquellos trabajadores que no ven viable la adquisición de créditos para vivienda a través del Infonavit o Fovissste", indicó.
Y es que los recursos de vivienda, que son administrados por el Infonavit para los trabajadores del IMSS y por Fovissste para los trabajadores del ISSSTE, han registrado un crecimiento promedio anual de 9 por ciento del 2000 al 2018.
Tan sólo en el 2018, los recursos para vivienda sumaron un billón 255 mil millones de pesos, que sumados a los ahorros de los trabajadores en la Afores alcanzarían la cifra de 4 billones 835 mil millones de pesos, lo que representaría un 82 por ciento del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) total aprobado para 2019 (5.8 billones de pesos).
Alcanzan cifra récord
De acuerdo con cifras de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), los activos administrados por las Afores alcanzaron una cota máxima en febrero del presente año, al sumar 3 billones 456 mil 950 millones de pesos, superando el último récord de septiembre del año pasado.
El rendimiento histórico del SAR fue de 11.02 por ciento al cierre de febrero; mientras que la ganancia real se ubicó en 5.13 por ciento.
Al cierre de febrero de 2019, el SAR registró plusvalías por un monto de 108 mil 699 millones de pesos, luego de haber acumulado en el 2018 minusvalías que ascendieron a nueve mil 55 millones de pesos.
"En el caso de las comisiones, de 2008 a 2018 bajaron de 2.0 a 1.0 por ciento, pero el monto que representan ha aumentado a un ritmo anual de 1.7 por ciento real. En el mismo periodo se pagaron, en promedio y cada año, 32 mil 230 millones de pesos por este concepto, lo que equivale al presupuesto de 2019 para el Programa Rectoría de Salud, cuyo objetivo es liderar y organizar la provisión de servicios de salud para toda la población", señaló Macías.
Comentó que los retos siguen siendo un bajo ahorro por parte de los trabajadores, ya que destinan 6.5 por ciento de su sueldo a la cuenta individual; los rendimientos van a la baja; el monto del ahorro no se actualiza con inflación.
El cobro de comisiones ha disminuido, pero sigue siendo alto comparado con las comisiones cobradas en otros países como Chile (0.57 por ciento sobre recurso administrado) y, la densidad de cotización es menor a 50 por ciento, es decir, los trabajadores cotizan la mitad de las semanas que deberían cotizar en un año.