Este 28 de octubre, México celebra en grande el Día de San Judas Tadeo, considerado como el santo de las causas difíciles o las causas perdidas, que cada año congrega a miles de feligreses en la Iglesia de San Hipólito, en la Ciudad de México. Pero alguna vez te has preguntado, ¿por qué se le conoce de este modo?
La Biblia se refiere a San Judas Tadeo como uno de los 12 apóstoles de Jesús, aunque hay quienes suelen confundirlo con Iscariote, el discípulo de Jesucristo que lo traicionó a cambio de treinta monedas de plata, según refieren los escritos religiosos.
En cambio, San Judas Tadeo se ha convertido en uno de los santos más venerados por los seguidores de la fe católica, al grado de que sus más fervientes devotos lo festejan todos los días 28 de cada mes en el Templo de San Hipólito y San Casiano, en el centro de la capital. Esto, debido a que ahí se encuentra la imagen más antigua del santo, que data de 1955.
¿Quién fue San Judas Tadeo y qué hizo?
De acuerdo con la Iglesia Católica, San Judas Tadeo fue el hermano del apóstol Santiago e hijo de Alfeo, hermano de San José, y de una hermana de la Virgen María, por lo que pasó a convertirse en el primo de Jesús.
Después de la crucifixión de Cristo, Judas Tadeo se dedicó a predicar la palabra de Jesús por toda Mesopotamia (lo que ahora conocemos como Libia). Sin embargo, al poco tiempo fue hecho prisionero durante las primeras persecuciones de cristianos, hasta que finalmente murió como mártir en la ciudad de Suanir, linchado por la multitud que no profesaba la fe.
¿Por qué a San Judas Tadeo se le considera el santo de las causas perdidas?
En entrevista con el semanario Desde la Fe, el padre Sergio Román explica que algunos feligreses, al verlo como el santo al que nadie le pedía, comenzaron a hacerle peticiones.
En Estados Unidos, la devoción a San Judas se extendió entre los migrantes europeos, luego de la Gran Depresión de 1929. Según la Agencia Católica de Informaciones y la Santa Brígida de Suecia, patrona de Europa, Jesús llegó a decir que quien necesitara algún favor complejo, debían acercarse a este apóstol. Por esta razón fue nombrado el ‘santo de las causas perdidas o imposibles’.
Por otro lado, el religioso Alberto Hernández dio otra versión del porqué a San Judas Tadeo se le conoce como el patrono de las causas difíciles y desesperadas.
Según relata Hernández, el culto que se le rinde en la CDMX tiene un trasfondo de mil 500 años de historia y está relacionado con un Judas poco conocido, llamado Addai, quien predicó la palabra de Dios en Siria, Persia y Mesopotamia.
‘Addai’ significa ‘Tadeo’ en lengua siriaca; y al ser éste judío, se le puso el patronímico de “Judas”. Explica que este predicador ganó fama por supuestamente tener poderes curativos y capacidad para realizar prodigios. No obstante, en México, fue considerado más como un “símbolo de consuelo” y “una guía para llegar a Jesús”.
“Los jóvenes lo ven como el ‘santo valedor’, un santo ‘amigo’ ante cualquier situación.”, menciona Hernández.