La violencia apareció en la jornada electoral de México. De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, durante las votaciones del 2 de junio ocurrieron 51 homicidios en el país. El estado con más asesinatos fue Baja California, con 5; seguido de Chihuahua, Puebla y Jalisco, con 4.
La violencia ha sido uno de los grandes problemas durante las elecciones. En 2023 se registraron 573 víctimas de la violencia político criminal.
Hasta el 2 de junio, las cifras de Votar entre balas arrojaban un total de 37 precandidatos y candidatos asesinados este año. El ‘broche de oro’ fue el homicidio de la alcaldesa de Cotija, Michoacán, Yolanda Sánchez.
La muerte golpeó dos veces a la puerta de la presidenta municipal. La primera ocurrió al recibir amenazas del CJNG y la segunda cuando fue levantada por sujetos armados en Guadalajara. Sánchez murió este 3 de junio, poco antes de terminar su mandato, al ser atacada por sujetos armados.
La alcaldesa de Cotija pertenecía al Partido Acción Nacional (PAN) y estaba acompañada por escoltas que lamentablemente no lograron contener el atentado.
Cotija, al occidente de Michoacán, se encuentra sumido en una ola de violencia que se ha recrudecido en los últimos años.
Entre los principales factores del estallido de inseguridad en el municipio se señala la llegada del Cártel Jalisco Nueva Generación, uno de los grupos más sanguinarios y poderosos de México.
Durante el periodo de campañas, los presidenciables evitaron detallar sus propuestas en materia de seguridad. Desde luego, la virtual ganadora a la presidencia, Claudia Sheinbaum, ha planteado continuar con el enfoque de Andrés Manuel López Obrador: ‘Abrazos no balazos’.