La adquisición de Pemex del 50 por ciento de la refinería de Deer Park Refining Limited Partnership, ubicada en Estados Unidos, no ayudará a la industria química nacional, puesto que la parte petroquímica del complejo se la quedará Shell, opinó Edmundo Rodarte Valdés, presidente de la Asociación Nacional de la Industria Química (ANIQ).
En entrevista con El Financiero, el representante industrial señaló que la industria nacional requiere de un mayor abasto de insumos, de los cuales la empresa productiva del estado es su principal proveedor; sin embargo, ante la baja producción de gas y petróleo, se ha visto limitada.
“Pemex no que se queda con la parte petroquímica que tenía Shell, definitivamente, te diría que nos interesa mucho mejorar el suministro de materia prima, energía eléctrica, gas natural y productos como amoniaco, etileno, etc., que no nos falten y muchos de ellos ya los importamos (…) Hasta ahora eso no ayuda, eso lo ve Shell porque ellos lo tienen con garantía de lo que hacen”, comentó el directivo.
También consideró que la compra de la adquisición en la Unión Americana le quita sentido a la construcción de la refinería de Dos Bocas, Tabasco, pues tendría la misma capacidad y a un valor 10 por ciento menor que el costo de construcción de la obra en el sur del país.
“Es un tema que Pemex que debió analizar, cuando vemos el monto de la compra, esta refinería tiene la misma capacidad que se proyecta para Don Bocas, pero el segundo nos costará 8 mil millones de dólares. Se compró una refinería con 10 por ciento de ese valor, no fue buena decisión construir Dos Bocas porque será de la misma capacidad”, opinó.