El encarecimiento del transporte marítimo de bienes y de los energéticos, la pérdida de valor del peso contra el dólar, así como el desabasto de algunas materias primas y el aumento en el precio de otras, obligó a empresas como Sigma, Kimberly Clark, Lala y Herdez a subir 17 por ciento en promedio el costo de algunos de sus productos, además de advertir que podrían hacer ajustes al alza durante el 2022.
“Todo este contexto de pandemia, inflación, factores estacionales se suman y dan como resultados que los precios se han incrementado dramáticamente lo de este año y el anterior”, dijo Cuauhtémoc Rivera, presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (ANPEC).
Agregó que las 1.2 millones de pequeñas tienditas de la esquina que hay en el país reportaron ya una caída de 30 por ciento las ventas del 2020, y en lo que va del año apenas recuperaron un 10 por ciento, con lo que se prevé que cerrarán 2021 con ingresos 20 por ciento por debajo del año pasado, afectadas por la escalada inflacionaria que amenaza con empeorar en el arranque del 2022.
“Qué es la inflación, la elevación de los precios de los productos que busca comprar el consumidor. El ticket promedio hace dos años era de 200 pesos, hoy ya vas de gane con tener uno de 100 pesos, y se llevan muy pocas cosas, no solo bajó el ticket, lo que buscan es lo esencial”, comentó Rivera.
La ANPEC encontró que el 47 por ciento de los clientes de sus asociados redujo la compra de embutidos, el 43 por ciento reportó haber bajado su consumo de cárnicos, el 39 por ciento de los clientes respondió que redujo la adquisición de comida enlatada y 20 por ciento la de legumbres.
De acuerdo con un análisis realizado por El Financiero, entre octubre del 2019, previo a la pandemia y octubre de este año, el portafolio de embutidos de la marca San Rafael y Fud de Sigma, y los pañales Huggies de Kimberly Clark, son los productos que más elevaron su costo al consumidor.
Embutidos, la proteína barata que se volvió cara
Los embutidos, considerados anteriormente como una fuente de proteína económica en contraste con la res, el pollo y el cerdo, ahora se han convertido en productos inaccesibles para una buena parte de la población.
El portafolio de jamón, chorizo y salchichas de la marca San Rafael de Sigma alimentos aumentó 17.7 por ciento en los últimos dos años, al pasar de costar 184.75 pesos en octubre del 2019 a 217.54 pesos el mismo mes de este, un incremento del 32.79 pesos.
Mientras que, en ese mismo periodo, su marca Fud pasó de costar 134.50 a 153.53 pesos por kilo, un aumento de 14 por ciento entre octubre de 2019 y el mismo mes de 2021.
“El volumen aumentó, pero también tenemos ingresos récord, principalmente explicados por las acciones de precios para mitigar presiones inflacionarias. En México alrededor del 50 por ciento de nuestro negocio proviene del canal tradicional, donde tenemos la oportunidad de reflejar los aumentos de precios”, señaló en conferencia con analistas Roberto Olivares, director financiero de Sigma.
Al tercer trimestre del 2021 la empresa tuvo ingresos de México por 2 mil 080 millones de pesos, 16 por ciento más que su período similar del 2020, destaca que en volumen el crecimiento en volumen fue de apenas uno por ciento.
“El canal tradicional está aumentando, el volumen en realidad subió un dígito bajo durante el trimestre. Y tenemos la capacidad de aumentar los precios allí”, refirió Olivares.
Pañales más caros de Kimberly- Clark
El portafolio de pañales Huggies de Kimberly Clark, subió 32.37 pesos en promedio los últimos dos años, al pasar de los 225.33 pesos en octubre del 2019 a los 257.90 pesos para este octubre, un alza del 14.4 por ciento.
Esto contra aumentos superiores al 40 por ciento que ha enfrentado la empresa en materias primas como fibras vírgenes, y fluff, que también golpearon al papel de baño.
Su marca Suavel actualmente está en promedio 66.23 pesos, 14.68 pesos por arriba respecto a 2019.
“Durante el cuarto trimestre y entrando en 2022, tendremos que lidiar con una economía que se está recuperando, pero no se está recuperando del todo, y todavía un entorno de costos todavía complicado”, expuso en conferencia con analistas Pablo González, director general de Kimberly- Clark México.
Debido a la anterior contemplan un incremento todavía del 7 por ciento hacia el cierre del 2021, y el arranque del 2022.
Al tercer trimestre de este año la empresa acumuló ingresos por 35 mil 175 millones de pesos, un alza marginal del 0.5 por ciento.
Lala sube 11.70 pesos
El portafolio de lácteos de Lala con sus leches, queso y mantequilla tuvo un incremento de 11 pesos en los últimos dos años, al pasar de 51.45 pesos en octubre del 2019 a 63.15 pesos para este 2021, equivalente a un 22.7 por ciento más.
“La razón principal tiene que ver con el traspaso de costos hacia el consumidor, mismo que viene incluso desde granos y alimento para el ganado, pero por supuesto tienes que incluir ahí el impacto de la denominación en dólares de muchos de ellos”, explicó Carlos Hermosillo, analista especializado en consumo.
Al tercer trimestre la empresa registró ingresos por 46 mil 287 millones de pesos en México, un crecimiento anual del 4.7 por ciento, apoyado en un incremento de precios táctico, señalaron en el reporte financiero del tercer trimestre del 2021.
La ANPEC
encontró en una encuesta que el 47 por ciento de los clientes de sus asociados redujo la compra de embutidos y el 43 por ciento bajó su consumo de cárnicos
Tenderos afirman que el ticket promedio de compra pasó de 200 a 100 pesos por visita.
La pandemia, las presiones logísticas, el alza en los costos de los energéticos, los empaques y materias primas, los obligó a encarecer sus productos.
Alejandra rodríguez mrodriguezg@elfinanciero.com.mx