Un jurado federal en Brooklyn, Nueva York, declaró inocente al mexicano Carlos Martínez, un exejecutivo de Fox Latin America, por lo que fue absuelto de conspirar para sobornar a funcionarios de fútbol para obtener los lucrativos derechos de transmisión del torneo más grande de Sudamérica, la Copa Libertadores, una parte del juicio conocido como FIFAGate.
El abogado de Martínez, Steve McCool, dijo “hoy se hizo justicia para Carlos”. “Los miembros del jurado escucharon que era un hombre inocente, y que nunca debería haber estado aquí en primer lugar”, dijo McCool.
En cambio, el argentino Hernán López, exdirector general de Fox International Channels, fue hallado culpable de pagar decenas de millones de dólares en sobornos para obtener los derechos de transmisión del Mundial y otros torneos prestigiosos. El jurado tardó cuatro días en emitir su veredicto.
La empresa uruguaya de marketing deportivo Full Play también fue condenada. La empresa, que también fue juzgada en Brooklyn por supuestamente pagar millones de dólares al año en sobornos a funcionarios de la Conmebol, el organismo rector del fútbol sudamericano, también fue condenada por los seis cargos que enfrentaba.
Hernán López fue condenado por participar en conspiraciones de fraude electrónico y lavado de dinero para obtener información privilegiada para asegurar los derechos de transmisión de los torneos de la Copa Mundial de 2018 y 2022 en Estados Unidos.
Su juicio, en un tribunal federal de Brooklyn, Nueva York, se derivó de una investigación internacional contra las trampas en la FIFA, el organismo rector del fútbol internacional, que irrumpió en escena con una redada antes del amanecer en un hotel de lujo de Zúrich en mayo de 2015.
La investigación derribó a algunos de los nombres más importantes del deporte, incluido Joseph “Sepp” Blatter, quien fue destituido como presidente de la FIFA después de 17 años en el cargo. Otros dos ex funcionarios de la FIFA fueron declarados culpables y sentenciados después de un juicio en 2017, y Estados Unidos obtuvo docenas de otras declaraciones de culpabilidad como parte de la represión.
Este juicio es uno de los últimos coletazos del conocido como “FIFAGate”, que estalló en 2015 y causó una grave crisis en el fútbol mundial al implicar a más de cuarenta altos cargos, sobre todo de las federaciones de CONCACAF (Norteamérica, Centroamérica y Caribe) y CONMEBOL (Suramérica).