Las previsiones del gobierno mexicano están, de nueva cuenta, por ser derribadas por la realidad: la Agencia Federal de Aviación (FAA) no ha fijado fecha para llevar a cabo una auditoría para la recuperación de la categoría 1 en seguridad aérea.
Esto ocurre pese a que el secretario de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) aseguró que la auditoría para recuperar la categoría estaba programada para marzo.
“Aún no se ha fijado fecha para la auditoría”, refirió una fuente de alto nivel del gobierno mexicano quien agregó que para poder pactar una fecha de la auditoría se tienen que aprobar las modificaciones a las leyes de aeropuertos y aviación civil que no han caminado en el Congreso.
Cabe recordar que, dentro del paquete de reformas a la legislación aeronáutica, el gobierno también incluyó dos artículos que no están relacionados con la recuperación de la categoría: el cabotaje y la autorización para que las paraestatales puedan administrar, al mismo tiempo, aerolíneas y puertos aéreos.
La fuente del gobierno, que pidió el anonimato, dijo que este paquete de reformas tendrá que ser aprobado para luego definir la posible fecha de auditoría, una versión que se contrapone a lo dicho por Jorge Nuño, titular de la SICT, quien el 16 de febrero aseguró a este diario que “estamos programando nuestra auditoría a mediados del próximo mes, en marzo. Ya lo decidimos”.
De acuerdo con la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero), la degradación en seguridad aérea ha afectado a la industria nacional, particularmente a las líneas aéreas en el mercado México-Estados Unidos, una situación que habría dado un golpe de mil millones de dólares en las finanzas de las empresas mexicanas.
Con ello, México se acerca a cumplir dos años degradado y cortando las alas a las líneas aéreas para poder colocar capacidad adicional hacia el mercado más grande del mundo en cuanto a oferta aérea se refiere.