El Gobierno federal reservó la información-hasta por 5 años- de los resultados, comunicaciones, resoluciones y discusiones finales de la última auditoría realizada por la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) a la autoridad aeronáutica mexicana, esto porque, según la AFAC, pondría en riesgo la recuperación de la categoría 1 y las relaciones diplomáticas con Estados Unidos.
“Periodo de Reserva: 5 años de conformidad a lo establecido en el artículo 99, párrafo sexto de la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública (LFTAIP), o bien hasta que se extingan las causas que dieron origen a su clasificación aludida”, refiere la respuesta de la Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC).
El Financiero ha solicitado, durante los procesos de degradación, asistencia técnica y auditorías los documentos que se han originado de las múltiples revisiones a la estructura de la autoridad aeronáutica mexicana y, nunca antes la AFAC se había negado a entregar los documentos que también forman parte del proceso de recuperación de categoría.
El último documento al que pudo acceder este diario fue el de las minutas de la última auditoría en seguridad aérea practicada entre el 29 de mayo y el 2 de junio de este año y, en donde aún se daba cuenta de los hallazgos no resueltos por la Agencia mexicana, mismos que han impedido la recuperación formal de la categoría 1.
Ahora, en un documento entregado la noche del 11 de septiembre, pero fechado el 31 de agosto, la AFAC indica que la información solicitada “no puede ser proporcionada al solicitante, toda vez que, la AFAC se encuentra en espera de la resolución que tenga a bien tomar la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés), respecto de la evaluación y determinación del cumplimiento de un país con estos estándares internacionales sobre los ocho elementos críticos de la OACI para una supervisión eficaz de la seguridad aérea”.
En la respuesta entregada vía transparencia, la autoridad aeronáutica agrega que la entrega de la información “puede menoscabar las relaciones diplomáticas que existen entre ambas autoridades, a efecto de lograr la recuperación de la categoría 1 en seguridad aérea ante la Administración Federal de Aviación”.
La AFAC argumenta que, si se da a conocer la información, se corre el riesgo de tener las mismas implicaciones que una pérdida de categoría 1, la misma que la autoridad no ha podido recuperar en 29 meses.
La autoridad dice que, si la información solicitada por este diario se difundiera, se “menoscabaría esta relación (bilateral México-Estados Unidos) en los siguientes puntos:
- Limitar la utilización de los códigos compartidos con los Estados Unidos de América, sin poder realizar vuelos operados por aerolíneas mexicanas para el servicio hacia/desde los EE. UU.
- Prohibir el aumento de nuevas rutas aéreas internacionales desde y hacia Estados Unidos de América.
- Privar el aumento en la transportación de carga aérea, derivado de la apertura de nuevas rutas internacionales y el aumento de la frecuencia y aeronaves en las rutas existentes.
- Afectación a los ingresos económicos por el no aumento de turismo internacional, derivado de la reducción de la oferta de vuelos.
- Impacto en la Inversión Extranjera Directa (IED) derivado de la nula ampliación de la oferta de vuelos con nuevas rutas internacionales, ya que los inversionistas buscan países que contribuyan con una reducción de costos de transportación que requieren sus negocios.
- Decremento de programas de inversión de las empresas aéreas en los proyectos de crecimiento de flota e infraestructura aeroportuaria, como en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
- Reducción en el crecimiento del tráfico aéreo entre México y Estados Unidos de América, y con ello la percepción por diversos servicios aeroportuarios como la Tarifa Única de Aeropuertos (TUA) de slots, uso de plataforma, suministro de combustible de aviación, etc.
Los daños señalados, no obstante, son los mismos que el país ha tenido mientras la AFAC no ha podido recuperar, a lo largo de más de 2 años, la categoría 1 en seguridad aérea.
Recientemente, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que México ya habría recuperado la categoría 1, esto de forma extraoficial y que sería esta semana cuando la FAA formalice esa decisión.
La AFAC se negó a entregar las comunicaciones electrónicas, documentos y/o informes que la FAA entregó a la AFAC en los 30 días posteriores a la finalización de la auditoría IASA de este año, así como el reporte a los 65 días que el auditor líder se comprometió a entregar a la AFAC.
Asimismo, no autorizó el acceso a un posible nuevo informe de hallazgos ni a los documentos relacionados con el proceso de recuperación de categoría 1 en seguridad aérea, aunque, de estos últimos, la propia autoridad ya ha entregado versiones públicas en al menos una decena de ocasiones en solicitudes hechas por este diario.