La entrega del modelo básico del iPhone 15 de Apple está tardando casi el doble del tiempo este año que su versión anterior, lo que indica una gran demanda de los teléfonos más actualizados de la compañía que se pusieron a la venta en la mayoría de países del mundo el viernes 22 de septiembre.
Los compradores en Estados Unidos deben esperar 10 días para recibir el modelo básico, frente a los seis días del dispositivo de la generación anterior lanzado el año pasado, según datos de Counterpoint Research. En el otro extremo del espectro, los tiempos de espera de pedidos anticipados del iPhone 15 Pro Max de primer nivel aumentaron a un récord, hallaron los investigadores. Las actualizaciones significativas de ambos modelos impulsaron una nueva demanda, aunque parte de ella se produjo a costa de las otras opciones de Apple, el 15 Plus y el 15 Pro, que registraron tiempos de espera reducidos.
En China, el mayor mercado extranjero de Apple, los tiempos de espera para la versión básica se cuadriplicaron respecto al año pasado, dijo Counterpoint. Eso sugiere que Apple está atrayendo a compradores incluso en medio de la competencia de dispositivos rivales como el Mate 60 Pro de Huawei Technologies.
“Esperábamos que los tiempos de espera del modelo base del iPhone 15 en China fueran mucho más bajos, tal vez a la par de los del año pasado”, dijo Archie Zhang, analista de Counterpoint. “Y en lo que respecta a lo ultrapremium, el Pro Max sigue siendo el iPhone más codiciado en China, y largos tiempos de espera de entrega lo reflejan”.
Los plazos de entrega prolongados no se han traducido en precios de reventa elevados, como afirmaron los investigadores el viernes a Bloomberg de que los precios de reventa en China solo dominan primas moderadas. Esto puede indicar que la demanda está impulsada, al menos en parte, por personas que intercambian sus dispositivos existentes.
“En un año marcado por la disminución de la demanda de teléfonos inteligentes, se prevé que el programa de intercambio desempeñe un papel fundamental en la reducción de las barreras psicológicas para quienes contemplan la compra de un nuevo teléfono”, dijo Ivan Lam de Counterpoint. “Se está convirtiendo en un factor cada vez más importante para el dominio del mercado de Apple”.