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Coparmex CDMX impulsa educación financiera obligatoria en México en congreso del IMEF

Adal Ortiz enfatizó que aunque desde 2011 la educación financiera está contemplada en los programas de estudios federales, su inclusión ha sido optativa

En el marco del XXXVI Simposium IMEF, titulado “Desafíos y oportunidades del nuevo sexenio”, Adal Ortiz Ávalos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana Ciudad de México (Coparmex CDMX), destacó la necesidad de implementar políticas públicas que promuevan la educación financiera obligatoria desde una edad temprana en México.

El evento fue organizado por el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), este jueves en el Club de Industriales de la CDMX, y Ortiz Ávalos participó en el panel de análisis “Desarrollo Económico Incluyente”.

Durante su intervención, Adal Ortiz enfatizó que aunque desde 2011 la educación financiera está contemplada en los programas de estudios federales, su inclusión ha sido optativa. Señaló que, en países donde esta formación es obligatoria, los resultados son significativamente mejores en términos de bienestar económico y social.

“Yo creo que deberíamos promover unificadamente políticas públicas en cuestión de educación financiera. Desde 2011 está contemplada junto a materias como matemáticas, pero tiene que ser obligatoria. En países donde la educación financiera es obligatoria, les va mucho mejor que a los que no la implementan”, señaló el presidente de Coparmex CDMX.


Asimismo, Ortiz subrayó la importancia de abordar la educación financiera desde un enfoque no solo matemático, sino también ético y cívico, como en el modelo italiano. “No hay un divorcio entre la prosperidad o la riqueza y la ética y la moral, es lo mismo. Una persona financieramente educada será una buena persona”.

El también co-fundado de Peibo, primera banca digital empresarial en México, habló además sobre la relación emocional que las personas tienen con su dinero y cómo influye en su percepción de las instituciones financieras.

“La percepción de los bancos y las instituciones financieras no es grata, incluso entre personas financieramente educadas. Imaginen a un empresario que apenas puede pagar la quincena o a un trabajador del hogar, es prohibitivo estar dos horas en una sucursal bancaria para que te resuelvan cuál es tu saldo o un pago no aclarado. Estamos hablando de la relación emocional de las personas con el manejo de sus recursos”, afirmó.

Ortiz Ávalos concluyó reiterando que la educación financiera tiene que ver con inclusión social, abogando porque esta formación sea un derecho para todos y una herramienta clave para el desarrollo económico.

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