Rappi Inc., una de las startups mejor valuadas de América Latina, espera estar lista para lanzar una oferta pública inicial en un año, dijo el cofundador Simón Borrero durante una conferencia de prensa.
La compañía colombiana, que ofrece servicios de entrega en nueve países, ha alcanzado un nivel de ganancias que permite a la dirección considerar una OPI, con Nueva York como la jurisdicción “probable”, señaló Borrero, y agregó que en los últimos tres años los ingresos se duplicaron.
“En un año estaremos listos, pero no tenemos prisa”, afirmó. “Ahora que somos rentables, estamos generando efectivo para invertir”.
Con el respaldo de SoftBank, la startup con sede en Bogotá se expandió por toda la región desde su fundación en 2015 y alcanzó el punto de equilibrio por primera vez a fines de 2023. Rappi continúa expandiéndose e invirtiendo en México y Brasil luego de la adquisición de un competidor, y planea llegar a Centroamérica, explicó Borrero.
Rappi está invirtiendo en herramientas de inteligencia artificial que mejoran el algoritmo de búsqueda y permiten realizar pedidos a domicilio por voz. La empresa ya está presente en 400 ciudades con 350 mil repartidores y 500 mil tiendas afiliadas. Actualmente, se centra en la expansión de su segmento Turbo, que ofrece tiempos de entrega de 10 minutos o menos en una selección de casi 4 mil artículos, según Borrero.
La compañía lleva meses preparándose para salir a cotizar en bolsa y en abril contrató a su primer director financiero, Tiago Azevedo. Consultado sobre futuras rondas de financiamiento, Borrero dijo que “lo ideal” sería que ahora financiaran el crecimiento a través de los ingresos, en lugar de vender deuda o capital.
Rappi había alcanzado las proyecciones de ingresos y ganancias para los últimos ocho trimestres, lo que “nos convierte en una empresa madura en términos de lo que podemos prometer al mercado”, concluyó Borrero.
La historia de Rappi: De regalar donas a acercarse a Wall Street
La empresa Rappi comenzó en 2015 en Bogotá, Colombia, teniendo como fundadores a Simón Borrero, Felipe Villamarín y Sebastián Mejía.
Arrancó ofreciendo servicios para comprar la despensa, con una promoción en la que las personas que descargaran la promoción se llevaban donas de regalo.
El botón ‘Rappi Antojo’ fue uno de los más populares en su momento, ya que con él las personas podían pedir lo que quisieran a sus casas.
La aplicación creció de a poco, al grado de que ahora cuenta con presencia en 250 ciudades, nueve países, y ha sido descargada cerca de 100 millones de veces.