En la aviación no todo se hace con aeronaves gigantes. A dos años de realizar su primer vuelo, TAR, de origen queretano, se ha convertido en la aerolínea regional líder en México y en los primeros seis meses de 2016 creció 178 por ciento en pasaje, en comparación con igual lapso del año pasado.
A su paso, superó a Aeromar, que lleva 29 años de operaciones y a Aero Calafia, que también cuenta con dos años funcionando.
La empresa es subsidiaria de Grupo Mafra, propiedad de inversionistas mexicanos radicados en Querétaro, cuyo negocio se enfoca en el desarrollo privado de ski acuático, publicidad vial, residencias para adultos mayores, una empresa de reciclaje de desperdicios y la aerolínea.
Miguel Franco, consejero del grupo, es dueño de TAR.
La aerolínea aplica una estrategia basada en atender ciudades con baja demanda de pasajeros o con grandes tráficos, pero en horarios no premium, lo que hace valer la operación de sus aviones Embraer 145 de 50 asientos, explicó Rodrigo Vásquez, director general de la aerolínea, en entrevista.
En el primer semestre de 2016, TAR transportó a 286 mil 740 pasajeros, 178 por ciento más que en el mismo periodo de un año antes. Visto de otra forma, movió a 100 mil pasajeros menos de lo que VivaAerobús transporta en un mes.
En el periodo de referencia, Aeromar atendió a 246 mil 320 personas y Aereo Calafia registró un tráfico de 83 mil 122 viajeros en el segmento de aviación regional. La queretana se puso a 80 mil pasajeros de distancia de la troncal Magnicharters, fundada en 1994.
TAR, que posee el 1.5 por ciento del total del mercado mexicano, considera que no todas las personas quieren volar en horarios premium, los cuales son los más demandados, por lo que ofrece sus servicios con ocupaciones de 70 por ciento, en promedio.
"En 12 meses, hemos pasado de tener 3 a 10 aeronaves, un plan que termina en septiembre con 13 y para finales de 2017 esperamos llegar a los 26 aviones. Estamos hablando de una inversión de 65 millones de dólares", detalló el CEO de TAR.
VOLARÁ AL EXTRANJERO
El franco crecimiento que TAR ha registrado la acerca a su apertura de viajes internacionales e incluso, el director general ya tiene la pretensión de atender al 5 por ciento del mercado nacional.
"En los siguientes meses estaremos recibiendo de manos de las autoridades aeronáuticas el permiso para volar más allá de las fronteras, nuestra expansión de flota después de 2017 seguramente será con aviones Embraer 175 o 190, buscaremos ampliar nuestra posición y vemos posible que en los próximos 5 años captemos al 5 por ciento de los pasajeros nacionales", sostuvo Vásquez.
PRECIOS BAJOS Y RUTAS, LA APUESTA DE TAR
El potencial de crecimiento de empresas como TAR se enfoca en destrabar la baja penetración de mercado que hay en México, que es menos de un viaje aéreo por persona al año, consideró Víctor Hugo Valdés, especialista de aviación de la Universidad Anáhuac.
"Si se considera que hay 2 mil 800 millones viajes de autobús y que unos 300 millones son susceptibles de trasladarse al avión, más aún en rutas regionales, lo que hace falta son aviones, rutas y tarifas competitivas", dijo Valdés.
La estrategia de tarifas agresivas también explica parte del éxito de la compañía, además de la operación de rutas punto a punto.
TAR ofrece rutas punto a punto. Por ejemplo, la que va de El Bajío a Puerto Vallarta la vende en mil 250 pesos, mientras que Aeroméxico, con una escala, pide 2 mil 850 pesos.
Incluso en rutas directas se pueden encontrar diferencias. En la Toluca-Cancún, TAR vende el boleto en mil 500 pesos, mientras que Volaris lo comercializa en 2 mil 499 pesos.
"Tratamos que las tarifas sean razonables porque las personas tienen alternativas terrestres y vehículos personales", dijo Rodrigo Vásquez, CEO de TAR.