Un exsocio de KPMG fue sentenciado este miércoles a un año y un día en una prisión federal por su papel en un plan para robar información confidencial para ayudar a la firma de contabilidad Big Four a desempeñarse mejor en su inspección anual por parte de un regulador.
David Middendorf, exsocio gerente nacional de KPMG de Calidad en Auditoría y Práctica Profesional, fue condenado en marzo por reclutar a miembros de la Junta de Supervisión de Contabilidad de Empresas Públicas para transmitir información sobre las auditorías.
En junio, la Comisión del Mercado Valores (SEC) de Estados Unidos anunció que multó con 50 millones de dólares a KPMG, luego de que un grupo de empleados alterara auditorías tras recibir información robada sobre inspecciones que el regulador hizo a la empresa.
También empleados de KPMG "hicieron trampa en los exámenes de capacitación internos al compartir de forma incorrecta las respuestas y manipular los resultados de las pruebas", dijo la SEC en un comunicado.
Además de la multa, la firma acordó contratar un consultor independiente para revisar y evaluar los controles de ética e integridad de la empresa y su cumplimiento con diversos compromisos.
KPMG admitió los hechos y reconoció que su conducta violó reglas que exige a la empresa mantener la integridad en el desempeño de un servicio profesional.
"Los estados financieros realizados con alta calidad y revisados de acuerdo con los principios de contabilidad aplicables y los estándares profesionales son la base de nuestros mercados de capital. Las fallas éticas de KPMG son simplemente inaceptables", dijo el presidente de la SEC, Jay Clayton, en el texto.
El año pasado, cinco exfuncionarios de KPMG fueron acusados de conspirar para interferir en las revisiones de la Junta de Supervisión Contable de la Empresa Pública (PCAOB) y así evitar que detectara deficiencias en las auditorías.
Este personal de alto rango buscó y obtuvo listas confidenciales de objetivos de inspección de la PCAOB, dijo la SEC en el texto.
Respecto a las trampas en los exámenes, el regulador detalló que empleados de KPMG que habían aprobado exámenes enviaron sus respuestas a sus colegas para ayudarlos a obtener calificaciones aprobatorias.
"Enviaron imágenes de sus respuestas por correo electrónico o impresas a sus colegas. Esto incluyó a socios líderes en el área de auditoría, que no solo enviaron respuestas de exámenes a otros empleados, sino que también solicitaron y enviaron respuestas a sus subordinados".
La investigación de la SEC encontró además que algunos empleados de auditoría de KPMG manipularon un servidor interno que aloja exámenes de capacitación para reducir la puntuación requerida para aprobar.
Hubo casos en que empleados obtuvieron calificaciones aprobatorias aunque respondieron correctamente menos del 25 por ciento de las preguntas.
Con información de The Wall Street Journal.