Mientras que en Estados Unidos la batalla de los operadores de televisión se libra en el terreno de los contenidos, en México el 80 por ciento de este segmento está controlado por firmas extranjeras.
Pese a esto, en la iniciativa de Ley Secundaria de Telecomunicaciones del Ejecutivo federal no se contemplan incentivos para los productores nacionales.
Time Warner, Comcast, Disney, 20th Century Fox y Viacom son los cinco grandes productores de contenidos estadounidenses que dominan las pantallas de la televisión nacional restringida.
En México, un mercado de 120 millones de consumidores, estas empresas proporcionan más del 80 por ciento de la programación por suscripción disponible vía cable, satélite y operadores de banda ancha, de acuerdo con Association of Programmers Latin America (TAP).
Este organismo agrupa a productores de contenido de más de 120 canales en América Latina a través de películas, programas noticiosos, deportes y de entretenimiento vía empresas de televisión por cable y satélite.
En el proyecto de Ley secundaria del Ejecutivo federal se propone que los concesionarios de radiodifusión cubran con producción nacional cuando menos un 20 por ciento de su programación, lo cual ya sucede.
"La Ley establece que los concesionarios deberán aprovechar y estimular los valores artísticos locales y nacionales y las expresiones de la cultura mexicana, de acuerdo con las características de su programación", se expone en el documento entregado al Congreso de la Unión en las últimas semanas.
Gustavo Pupo-Mayo, presidente del consejo directivo de Association of Programmers Latin America, comentó que los programadores de Estados Unidos apoyaron el crecimiento de la TV de paga hace más de 20 años, época en la que su desarrollo era ínfimo.
"Apoyamos al negocio y creo que hemos ayudado a crecer la TV de paga en México como una opción más al televidente. Nosotros somos quienes más hemos invertido en la televisión de paga", consideró el directivo.
Incluso en el caso de la TV abierta, su programación depende en un 40 por ciento del abastecimiento del extranjero, de acuerdo con Francisco Vidal Bonifaz, especialista en el tema.
"Ahora hasta vemos las novelas producidas por Telemundo, en español", indicó.
El experto externó su preocupación de que la industria de las redes móviles se pueda convertir en una seria condena para la industria mexicana y que se presente una suerte de neocolonialismo en el ámbito de la cultura.
Por otro lado, Vidal Bonifaz explicó que en el 2012 de los 319 estrenos de películas en cines mexicanos sólo 67 fueron filmes mexicanas, lo cual también refleja el limitado incentivo para los productores de contenidos nacionales o locales.
Lejos de que los operadores de televisión restringida busquen incluir a su oferta contenidos nacionales, cada vez hacen más alianzas con los productores internacionales, incluso, para aprovecharlos en plataformas móviles.
Un ejemplo de esto, es la telefónica Axtel que en su primer año en el negocio de televisión fue capaz de hacerse de más de 60 mil clientes. La firma de telecomunicaciones con oficinas corporativas en Monterrey ofrece internet, es proveedora de televisión de paga y de soluciones TIC (Tecnologías de Información y Comunicación).