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HSBC está listo para recortar aproximadamente el 15 por ciento de su fuerza laboral, y está cobrando 7.3 mil millones en cargos en su último intento de revivir su fortuna desde la crisis financiera global.
El banco advirtió que el brote de coronavirus y la interrupción económica en Hong Kong pueden afectar su desempeño en 2020.
Para esa reestructuración, el banco con sede en Londres abandonará varias unidades de negocios y apunta a recortes de costos de 4.5 mil millones de dólares.
El banco, que obtiene la mayor parte de sus ganancias en Asia, todavía está buscando un CEO permanente, pues aún tiene como jefe interino a Noel Quinn.
"Partes de nuestro negocio no están ofreciendo rendimientos aceptables", dijo este martes en un comunicado Quinn, respecto a las ganancias de todo el año del banco. "Por lo tanto, estamos delineando un plan revisado para aumentar los rendimientos de los inversores".
Quinn, quien también está saliendo de varias líneas de negocios, dijo en una entrevista con Bloomberg que "es justo decir que nuestra dirección de viaje será mover el personal actual de 235 mil para acercarnos a los 200 mil en los próximos tres años".
Las acciones de HSBC tuvieron su mayor caída en seis meses en Hong Kong y cayeron hasta un 3.2 por ciento en el comercio. El banco advirtió que su perspectiva para 2020 es incierta.
Los recortes en HSBC se extenderán a partes de sus negocios de banca de inversión europeos y estadounidenses. En Estados Unidos, los activos vinculados a sus operaciones comerciales se reducirán a la mitad en virtud del nuevo plan. En cambio, el prestamista reforzará sus unidades de banca de inversión en Asia y Oriente Medio.
Una estrategia renovada es un elemento clave para los planes del presidente del banco, Mark Tucker, de transformar HSBC a medida que aumentan las preguntas sobre sus rendimientos relativamente pobres dada su exposición a muchas de las economías de más rápido crecimiento del mundo, en particular China, donde ha centrado su inversión.
Los 7.3 mil millones de dólares en cargos incluyen 4 mil millones de dólares vinculados a su división global de banca y mercados, que alberga el banco de inversión. Otros 2.5 mil millones de dólares provienen de su banco comercial europeo.
Los beneficios antes de impuestos ajustadas de HSBC fueron de 22.2 mil millones, por lo que superaron las previsiones de los analistas, a pesar del cargo multimillonario contra el costo de la reestructuración. Se había pronosticado que HSBC informaría una ganancia antes de impuestos de 21.8 mil millones, según la estimación de 18 analistas compilada por la compañía.
No obstante, el banco suspendió su programa de recompra de acciones para 2020 y 2021.
El anterior jef, John Flint, fue destituido como CEO el año pasado, en parte por las preocupaciones de Tucker de que el ejecutivo carecía de la capacidad de cambiar el rendimiento del banco.
Quinn, Tucker y el director financiero Ewen Stevenson comenzaron a desarrollar planes destinados a reducir la base de costos del banco y centrarse en los mercados de mayor retorno, al tiempo que redujeron las exposiciones a las regiones y operaciones consideradas deficientes.