Un grupo de inversionistas encabezados por Alejandro del Valle y Carlos Cabal Peniche adquirieron 90 por ciento de las acciones de Interjet, empresa que hasta antes de la pandemia era controlada por la familia Alemán.
"¿Qué es lo que hicimos cuando llegamos a Interjet? Compramos la mayoría de las acciones, 90 por ciento de las acciones. Sabíamos el problema que teníamos, sabíamos en qué nos metíamos, confiábamos en que muy rápido podríamos llegar a una negociación con el Gobierno en cuanto a los impuestos", señaló Del Valle en una reunión con trabajadores a la que El Financiero tuvo acceso.
Aunque en julio se anunció la capitalización de Interjet por 150 millones de dólares, se desconocía la participación a la que se harían acreedores los nuevos inversionistas de la aerolínea.
"Nadie invierte porque los impuestos generan un bloqueo de toda la empresa, por eso tenemos todo embargado, hasta las acciones de la empresa", detalló Del Valle.
Con ello, la familia Alemán-fundadora de la empresa hace 14 años- perdió el control accionario de la línea aérea que ahora atraviesa una de sus peores crisis con problemas laborales, pasivos millonarios y con el adeudo de impuestos que no permiten el flujo de capital 'sano' a la caja de la compañía.
En la reunión, el presidente ejecutivo de la aerolínea explicó a los trabajadores que ni la banca de desarrollo puede prestar a la aerolínea debido a los adeudos con el Gobierno, con quien esperan llegar a un acuerdo para diferir la deuda y así poder revertir la crítica situación financiera por la que atraviesa Interjet.
Cabe señalar que tarde se llevará a cabo una reunión entre la representación sindical de Interjet en la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, en donde se busca garantizar el pago de dos meses de sueldos pendientes y en donde el emplazamiento a huelga se mantiene como una posibilidad.