Al cierre del primer trimestre de este año, el Índice de las Fibras se ubicó en 230.62 pesos, lo que marcó una recuperación de este indicador que repuntó 23.2 por ciento en valor, frente a los 187.12 pesos en los que se cotizó el 31 de diciembre.
Esto se debió a la caída de 19.6 por ciento en este índice durante el año pasado, el mayor desplome desde que se tiene registro, al ser uno de los indicadores más afectados del mercado mexicano, incluso frente al IPyC que disminuyó apenas 12.3 por ciento.
Expertos señalaron que el freno en el alza de la tasa de interés por parte de la Reserva Federal (FED) y en consecuencia de Banco de México (Banxico) impulsó el repunte en el precio de los certificados de las Fibras.
Cabe recordar que, en 2018, Banxico hizo cuatro ajustes a la tasa de referencia, que sumaron un incremento de 100 puntos base, al pasar de 7.25 por ciento a 8.25 por ciento al cierre de dicho año, lo que impactó el precio de los certificados de las Fibras.
"Los fundamentales del sector de bienes raíces comerciales están sólidos (nivel de ocupación y rentas). El año pasado los precios de las Fibras no hacían sentido al considerar la parte operativa, estas caídas se debieron a la tasa de interés", explicó Juan Ponce, analista de Actinver.
Roberto Solano, analista de Monex, explicó que, en la actualidad, con tasas más prudentes, se estima que los dividendos de los fideicomisos de inversión en bienes raíces se mantengan atractivos para los inversionistas.
"Sigue habiendo una expectativa de crecimiento en la métrica del dividendo. Por eso se retomó el apetito por este sector", señaló.
Descartan otro repunte en el año
Roberto Solano, analista de Monex, refirió que en septiembre se prevé un ajuste a la baja de 25 puntos base en la tasa de referencia, sin embargo, descartó que se dé otro repunte importante en los precios de los certificados de las Fibras como sucedió en el primer trimestre del año.
En este sentido, Ponce advirtió que un posible debilitamiento de la economía será negativo para estos instrumentos de inversión, ya que bajaría sus niveles de ocupación, precios de renta y desarrollo de nuevos proyectos.
Sofía Robles, analista de Intercam, apuntó que 2019 será un año también complicado para los fideicomisos y en general para todos los activos en Bolsa, por la prima de riesgo del país, la volatilidad internacional y la posible desaceleración de economías internacionales como Estados Unidos, con quien México concentra el 80 por ciento de sus relaciones comerciales.
"La recuperación más relevante de las Fibras vendrá a mediano y largo plazo, a partir de 2020", concluyó Robles.
Sin embargo, Alejandra Marcos, directora de análisis de Intercam, fue más optimista y estimó que si comienzan los recortes en la tasa de referencia por parte de Banxico, "pudiéramos seguir viendo mejores precios (en las Fibras)".
Esto porque los fideicomisos inmobiliarios al dar un dividendo se comparan con los instrumentos de renta fija, por lo que si bajan las tasas de interés las Fibras tienen dividendos atractivos frente al rendimiento que daría cualquier otro instrumento de deuda y por ende sus precios por acción mejoran.
Las industriales, las más fuertes
Los vehículos de inversión inmobiliaria que más ganaron valor de enero a marzo de este año fueron los que tienen mayor participación en el segmento industrial, como son Fibra Terrafina, Prologis y Fibra Uno, luego de que el año pasado casi todos los fideicomisos tuvieron caídas de doble dígito.
"Las Fibras que tienen mayores catalizadores son las industriales. Es uno de los sectores más atractivos por la certidumbre que ha generado el T-MEC. Es uno de los sectores más atractivos", dijo Solano.
Agregó que el interés de los inversionistas por estas Fibras también dependerá de sus reportes trimestrales y de los dividendos que ofrezcan este año.
En 2018, el precio de la acción de Terrafina registró una caída de 21.9 por ciento, pero en el primer cuarto de este año, el fideicomiso de inversión en bienes raíces fue el que más valor reconquistó con un alza de 30 por ciento.
Por su parte, Prologis tuvo una reducción de 11 por ciento en el precio de su acción en 2018, pero el primer cuarto de este año se recupero 27.6 por ciento.
Jorge Girault, CFO de la Fibra, señaló en conferencia con inversionistas que este año reciclarán activos y no realizarán adquisiciones, a fin de fortalecer su liquidez sobre inversión de capital, además, de llevar a cabo alguna estrategia para aportar valor a sus títulos.
Fibra Uno fue el fideicomiso con la mayor baja en la cotización de sus títulos en 2018, con una reducción de 25 por ciento, pero al cierre de los primeros tres meses del año recobró 24.3 por ciento su valor.
Ponce comentó que tanto el impacto como la recuperación se debe a que es la Fibra con mayor liquidez.