El impuesto a la plusvalía inmobiliaria en la CDMX puede generar desinterés de la población y de los desarrolladores para vender sus propiedades debido a las pérdidas que traería un gravamen de ese tipo, consideraron expertos.
La Asamblea Legislativa de la CDMX aprobó la semana pasada una nueva ley de vivienda que grava la plusvalía generada por los bienes inmuebles en beneficio de la sociedad que habita en la comunidad.
"Como tal no se crea un nuevo impuesto, al menos no explícitamente, sin embargo al decir que está facultada para hacer todas las acciones necesarias para poder recaudar esta cuestión, pues la realidad es otra.
Esto bien podría derivar en un gravamen a la plusvalía y lo realmente preocupante es que afectaría tanto a los ciudadanos como a los grandes desarrolladores", dijo Sergio Rodríguez, profesor de la Facultad de Derecho de la UNAM.
Analistas coincidieron en que un impuesto como ese se traduciría en un alza en el precio de los inmuebles, ya que los vendedores trasladarían el gravamen al costo de venta de los mismos, además de que la normativa no es clara sobre cómo se aplicará.
"Es un impuesto a la renta local en el valor de los inmuebles. Hay varias cosas que vienen alineadas a esto, tienes el impuesto a la plusvalía, te podrán calcular el impuesto predial dependiendo de las construcciones que haya en la zona y te pueden cobrar por tener terrenos ociosos", comentó Eugene Towle, socio director de Softec.
Para el experto, muchas de las propuestas dejan mucho espacio para la interpretación, lo que genera incertidumbre.
"Cuando tenemos indeterminación, lo primero que sucede es que los inversionistas, que puede ser cualquier persona, detienen sus compras en espera de lo que pueda suceder, entonces se frenan las ventas y lo que nosotros percibimos es que va a haber un periodo de espera donde la gente va a ver qué pasa. La otra cosa son los bancos, quienes se preguntarán cuál es el valor real de la garantía que les estás dando al momento de solicitar una hipoteca", añadió el ejecutivo.
En la CDMX, la venta de vivienda del segmento residencial creció 4.4 por ciento de enero a agosto de 2016, al desplazarse 2 mil 690 unidades. En el caso del segmento medio, el alza fue de más de 40 por ciento al comercializarse 8 mil 152 propiedades.
Datos de la SHF revelan que de enero a septiembre de 2016 los precios de las propiedades en la capital del país subieron 8.89 por ciento contra igual lapso de 2015.
