L'Oreal se hizo un nombre con una tecnología innovadora para teñir el cabello hace más de un siglo. Ahora, la mayor compañía mundial de belleza se enfrenta en tribunales a una startup de California que afirma ser pionera.
Olaplex, asegura que el gigante francés robó sus secretos comerciales relacionados con un popular sistema de tres pasos que protege el cabello durante tratamientos de decoloración, apoderándose de ellos en 2015 cuando ambas compañías estaban en conversaciones para concretar una adquisición.
Busca una indemnización en efectivo por el presunto robo y daños por la infracción de dos de sus patentes por parte de L'Oreal.
"Este es un caso de robo corporativo, de una de las compañías de belleza más grandes del mundo vio algo que quería y lo tomó para sí misma", manifestó en su declaración de apertura el lunes Diane Doolittle, abogada de Olaplex, ante un jurado en Wilmington, Delaware.
Aseveró que los secretos comerciales son "la joya de la corona de Olaplex".