México se convirtió en uno de los jugadores con mayor 'despegue' en la industria aeroespacial, al producir desde motores, hasta puertas de carga, fuselajes, trenes de aterrizaje, sistemas de conexión y todos los componentes de una aeronave.
Para el cierre de este año, Luis Lizcano, director general de la Federación Mexicana de la Industria Aeroespacial (FEMIA) –que agrupa a firmas como Airbus, Bombardier Aerospace , General Electric y Honeywell–, estimó que la manufactura de aeroplanos exportará cerca de 9 mil 500 millones de dólares en componentes de avión.
"A pesar de que, en el mundo, la mayor parte de la industria está abocada a la parte militar, en México la mayor parte de las manufacturas son para el sector comercial, civil, por lo que hay un gran potencial de crecimiento", aseguró Lizcano.
Durante los últimos 15 años, las exportaciones mexicanas de la industria aeroespacial crecieron a un ritmo de 14.4 por ciento anual, esto derivado de una mayor incursión de empresas nacionales y extranjeras, como Airbus, Bombardier, Safran, General Electric, Latécoère.
Además, el año que termina es el segundo con mejor desempeño en el último lustro, con un crecimiento anual del 10 por ciento.
Como en otros sectores, Estados Unidos es el principal socio comercial en la industria aeroespacial: ocho de cada 10 exportaciones nacionales tienen como destino el 'vecino del norte', según datos de la Secretaría de Economía.
En opinión de Lizcano, México ha tenido un importante protagonismo en el sector porque los costos de producción en el país, particularmente de la mano de obra, son menores a los de otras naciones fabricantes como Francia y Canadá.
Además, las cinco regiones mexicanas con mayor desarrollo en la industria aeroespacial son las que han implementado sistemas de educación técnica y universitaria orientadas a la incursión de los alumnos a este tipo de disciplinas.
"Un común denominador es que el desarrollo está relacionado con un proyecto de educación especializado en estas regiones, hay capacitación de talento para la industria, que requiere altas especificaciones técnicas", dijo el presidente de la FEMIA.
Baja California, Sonora, Chihuahua, Nuevo León y Querétaro son las entidades con mayor número de empresas establecidas que fabrican algún componente de aeronaves para empresas nacionales e internacionales.
Van por ‘vuelo’ más alto
A pesar del protagonismo de México, que se coloca en la décimo segunda posición en cuanto a volumen del mercado aeroespacial, aún hay oportunidades para volar más alto.
El plan de la FEMIA es duplicar las exportaciones en este sector en los siguientes años, para enviar productos al extranjero por cerca de 19 mil millones de dólares al año.
Estas previsiones están sustentadas en los pedidos de los grandes fabricantes Airbus y Boeing, quienes prevén que en las próximas dos décadas será necesaria la fabricación de entre 40 y 44 mil nuevos aeroplanos, es decir, el doble de la flota a nivel mundial que opera actualmente.
"Las oportunidades de mercado están basadas en una alta demanda, tenemos el mercado cerca, los pedidos siguen elevados. El potencial que tenemos es gigantesco: el plan es duplicar las exportaciones", aseguró Lizcano.
Chihuahua, inclusión de Pymes
Esta entidad alberga 52 instalaciones industriales que fabrican componentes de aeronaves, colocándola como uno de los estados con mayor dinamismo en la industria.
René Espinosa, director general de Aeroclúster de Chihuahua, dijo que los grandes jugadores de la industria están establecidos en el país, por lo que es necesario voltear a ver a las pequeñas empresas para integrarlas a la cadena de valor y fortalecer el sector aeroespacial en la entidad.
"Los grandes jugadores ya están establecidos en México, debemos desarrollar la parte de servicios, de procesos secundarios. Seguir desarrollando la cadena para integrar a las Pymes, empresas que puedan encontrar un ecosistema industrial con talento", mencionó Espinosa.
Nuevo León, va por política pública aeroespacial
La llegada de nuevas firmas nacionales o internacionales está ligada a la elaboración de políticas públicas en el sector que faciliten la instalación de firmas de proveeduría y fabricación de partes de avión en el país.
Con 33 empresas aeroespaciales en su territorio, Nuevo León apuesta por una colaboración con el sector público para incentivar la llegada de capital a ese estado.
"Para poder ser atractivo en la industria aeroespacial es necesario tener un marco de política pública para atraer inversión", aseguró Claire Barnouin, directora general del Aeroclúster de Monterrey.
Querétaro, apuesta por educación
La entidad del centro del país es una de las pocas con una Universidad dedicada a la industria aeroespacial y, de acuerdo con Antonio Velázquez, director del Aeroclúster del estado, el desarrollo de la educación ha sido una de las claves para que empresas como Bombardier se instalaran en Querétaro.
"Es una industria a largo plazo, si un gobierno, la academia está comprometido, ese será el éxito. Se tomaron decisiones visionarias, como la creación de un aeropuerto, la Universidad Aeronáutica, la llegada de Bombardier", afirmó Antonio Velázquez.