Siete de las 20 empresas que participan en la segunda licitación de campos petroleros de la Ronda Uno en México son investigadas por asuntos de corrupción o colusión en diferentes países.
La italiana ENI International; Pan American Energy, de Argentina; Chevron, de Estados Unidos; CNOOC, de China; y Lukoil Overseas, de Rusia, están siendo investigadas por presuntos sobornos para ganar contratos o extender permisos para extracción en países como Nigeria, Argentina, Indonesia, China y Rumania.
En tanto, que Galp Energía, de Portugal; y CEPSA, de España, fueron multadas recientemente con 20.1 millones de euros por autoridades de competencia de España y Portugal por coludirse para subir los precios de gas butano y gasolinas en detrimento de los consumidores.
En la segunda fase de la Ronda Uno están en juego nueve campos petroleros que se adjudicarán en cinco contratos para la explotación de aguas someras, con una superficie de 281 kilómetros cuadrados y reservas certificadas de 671 millones de barriles de petróleo crudo equivalente, con una perspectiva de producción de 124 mil barriles diarios y una inversión de alrededor de 3 mil millones de dólares.
Especialistas del sector han alertado sobre la necesidad de que en México se tomen todas las medidas necesarias para evitar este tipo de prácticas, de manera que haya la suficiente transparencia en las licitaciones y su posterior ejecución.
Nymia Almeida, vicepresidenta en la oficina de calificación crediticia de Moody's en México, dijo que en países como los latinoamericanos es común que se susciten estas prácticas de corrupción, e incluso, las leyes pueden evadirse.
"Es un esfuerzo muy fuerte prevenir estos actos, las empresas se sienten vulnerables, ahí está el caso de Brasil (donde Petrobras fue acusada de corrupción). Es un riesgo de reputación donde las empresas perderían socios, proveedores y clientes, si tú estás condenado por corrupción en un país tienes congelamiento en ese gobierno. Sí, deberían revisar los casos en otros países, porque al final son credenciales, los contratos son relaciones de largo plazo", agregó.
Por su parte, Luis de la Calle, director general y socio fundador de De la Calle, Madrazo y Mancera, consultoría especializada en economía, procesos reglamentarios y asuntos relacionados con el comercio internacional, consideró que una medida que se debe impulsar en México es que las empresas sean públicas, para conocer a detalle su situación.
"Evitar la corrupción es una responsabilidad de ambas partes (empresas y gobierno), una cosa que es importante fomentar es que las empresas que participen en la Ronda Uno coticen en bolsa, que sean públicas. Siempre hay riesgos, eso lo tenemos con o sin reforma energética", señaló.
Manuel Guadarrama, especialista del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), destacó que la ley debe facilitar la competencia, por lo que la aplicación de candados podría complicar una licitación. "Si bien la razón de establecer límites para contratar a empresas que estén siendo investigadas en el extranjero por corrupción es proteger a la entidad pública de futuros daños por la misma conducta, no cabe en la legislación como un impedimento", opinó.
LLEGAN 'MERMADAS'
Las empresas públicas que participarán en la segunda licitación de la Ronda Uno no llegan en su mejor momento en los mercados bursátiles, puesto que en un año han perdido 36 por ciento de su valor en promedio.
Esto es reflejo de la caída de 48.9 por ciento que ha observado el precio del petróleo en los últimos 12 meses, lo cual influye directamente en el valor de los papeles de los grandes extractores de crudo.
"Francamente el mercado controla el precio (de las acciones), y lo que tenemos que hacer nosotros es centrarnos en las variables que podemos controlar", dijo en una reunión con analistas Jeffrey Woodbury, vicepresidente de ExxonMobil.