En junio, el sector turístico comenzó a dar señales de una lenta recuperación, con incrementos en la llegada de viajeros internacionales y su derrama, en comparación con mayo, tras la suspensión de la actividad de la 'industria sin chimeneas' que durante el sexto mes del año reinició limitada y paulatinamente operaciones.
En junio, la derrama económica de los viajeros internacionales en los destinos turísticos del país aumentó 83 por ciento con respecto al mes previo de mayo, según cifras del INEGI.
Durante el sexto mes del año, la derrama de los viajeros extranjeros fue de 175.2 millones de dólares, una cifra superior a los 95.7 millones de dólares captados por la industria en mayo.
Adicionalmente, la llegada de turistas internacionales creció 10 por ciento en junio en comparación con el mes anterior inmediato, al alcanzar los 981 mil viajeros extranjeros.
Sin embargo, Braulio Arsuaga, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), opinó que los números del INEGI revelan una lenta recuperación, por lo que la situación financiera de hoteles, aerolíneas y destinos turísticos se encuentra todavía en una situación crítica.
"La recuperación la vemos lenta, no vemos signo de mejora de ocupación en los hoteles que está en condiciones financieras muy críticas", alertó Arsuaga.
En entrevista para El Financiero Bloomberg TV, el representante empresarial indicó que en el primer semestre del año se perdieron alrededor de 5 mil millones de dólares en derrama turística sólo por los visitantes internacionales que han dejado de llegar a México.
Aunque entidades como Quintana Roo, Jalisco o Baja California tienen ocupaciones cercanas al 30 por ciento – el límite permitido por las autoridades sanitarias –, otros destinos como la Ciudad de México tienen un nivel de cuartos ocupados que no rebasa el 5 por ciento.
"Es complicado porque en la Ciudad de México que tiene un porcentaje de ocupación entre 55 y 60 por ciento en el año, ahora tiene 5 por ciento. Esto quiere decir que no hay volumen, esta ciudad se alimenta de los viajeros de la cuenta comercial (de negocios)", detalló Arsuaga, quien agregó que la recuperación de empleos turísticos será complicada en la capital bajo ese escenario.
En su comparativo anual en junio, el número de turistas internacionales cayó 74.8 por ciento, frente al mismo mes del año pasado.
Adicionalmente, los ingresos que dejaron los viajeros extranjeros disminuyeron 90.3 por ciento en junio, en comparación con el sexto mes del año pasado, al ubicarse en apenas 175.2 millones de dólares, frente a los mil 804 millones de dólares de junio del 2019.
No solo llegan menos turistas internacionales, sino que el gasto promedio de estos también ha disminuido. En el sexto mes del año se registró un gasto medio de 178.4 dólares por turista internacional, una caída del 61.4 por ciento a lo que gastaron los viajeros hace poco más de un año.
En forma acumulada, por lo que hace a los ingresos, en el primer semestre del año, México recibió 6 mil 530 millones de dólares por concepto de visitantes internacionales, una reducción de 50 por ciento frente al primer semestre de 2019.
Coronavirus tira pronósticos de más derrama
La pandemia ha derribado todo pronóstico de crecimiento en el sector y la promesa de Miguel Torruco, titular de la Secretaría de Turismo (Sectur), de elevar la derrama de divisas turísticas.
La crisis sanitaria ha dado un duro golpe a la 'industria sin chimeneas' en el país, dejando aeropuertos casi detenidos y hoteles cerrados por al menos un par de meses.
De acuerdo con datos de SiteMinder, una plataforma para captar huéspedes, en destinos como Cancún las tarifas promedio han disminuido hasta en un 40 por ciento.
La reducción en los precios de los cuartos-noche podría ser contraproducente para los hoteleros.
Rafael García, expresidente de la Asociación Mexicana de Hoteles y Moteles (AMHM), señaló que las previsiones en la reapertura resultaron demasiado optimistas, pues muchos de los hoteles continúan cerrados o con niveles bajos de reserva.
"Hay hoteles que permanecen cerrados porque les resulta menos costoso estar así que abrir sus propiedades. El impacto sigue siendo fuerte, las previsiones en la reapertura fueron optimistas y hay otros hoteles que ya no reabrirán", señaló García en entrevista para El Financiero.