La noche del 12 de octubre significó el regreso de Bad Bunny a la música después de año y medio sin lanzar nuevas canciones y en un 2023 que inició con polémicas, como la del celular de una fan que arrojó al mar.
Nadie sabe lo que va a pasar mañana es el nombre de su séptimo material discográfico, donde una de las cosas que más llamó la atención de sus seguidores y críticos musicales es su regreso al género que lo vio nacer: el trap.
Las señales ya estaban puestas sobre la mesa; algunos de sus videos los comentó en semanas pasadas con un emoji de ojo, en referencia a su álbum X 100PRE, mismo en el que el trap latino se hace presente y con el que empezó a ser conocido mundialmente.
¿Qué es el trap?
El trap es un subgénero musical derivado del rap, aunque también toma influencias del hip hop y hasta la electrónica, ya que una de sus principales características es la utilización de elementos como sintetizadores y modificadores de voz, lo que hoy día llamamos autotune.
Este nació en barrios al sur de Estados Unidos en la década de los noventa, para ser más precisos en estados como Georgia.
Los artistas considerados como ‘los padres del trap’ son raperos que decidieron introducir nuevos elementos a su música, como Three 6 Mafia, UGK, Outkast y Goodie Mob.
Poco a poco, este nuevo subgénero empezó a cobrar popularidad e incluso fue comparado con el reguetón, que creció a la par del trap. Sin embargo, existen diferencias significativas entre ambos.
Características del trap
Por lo general, el trap suele ser menos ‘alegre’ que el reguetón, ya que sus letras están enfocadas en hablar sobre algunas problemáticas sociales, consumo de drogas y hasta versos más depresivos. Es como una especie de ‘sad rap’.
Otros temas que se pueden apreciar dentro del trap es la ostentación, el lujo y lo caro, porque es un subgénero derivado del gangsta rap, mismo que toca este tipo de situaciones en sus composiciones, por lo que suele ser más ‘oscuro y siniestro’.
En cuanto a la musicalización de los versos, el trap se caracteriza por el gran uso de bajos y sintetizadores, además de la utilización del autotune en las voces para crear nuevos sonidos.
A pesar de que nació en los barrios de Estados Unidos, este género se ha extendido a lo largo de América, y en la actualidad hay más artistas latinos conocidos por ser exponentes de trap, como en el caso de Bad Bunny.