Mariachis y coronas blancas: Así fue el homenaje a Carmen Salinas

El último adiós a Carmen Salinas estuvo lleno de música en el homenaje a cuerpo presente que su familia, colegas y seguidores le hicieron en la explanada del Monumento a la Madre, en la Ciudad de México.

Un mariachi le puso voz a canciones como A mi manera, Nube viajera y Solamente una vez en el escenario en la alcaldía Cuauhtémoc, que estaba cobijado por una frase de la popular actriz con letras negras en fondo blanco: “Chiquillos pero boquetones, ¿creyeron que me iba, bombos? Me quedo en sus corazones”.

La carroza fúnebre salió de las instalaciones de Félix Cuevas alrededor de las 10:15 horas, cuando varios motociclistas escoltaron el coche que transportaba a la también empresaria. Tras su paso por calles como Gabriel Mancera, Eje Central y Avenida Reforma fue acompañada de su familia y medios de comunicación.

A su llegada a Sullivan, fue trasladada encima de una alfombra roja al lugar donde el féretro, tapado por una manta de color rojo, sería resguardado por sus allegados. La primera guardia fue realizada por parte de su familia, quienes se tomaron de las manos y aplaudieron mientras la recordaron con tristeza. En algunas de ellas se pudo ver a algunos camarógrafos, así como al actor Rafael Inclán y el productor Juan Osorio.

Rodeada de coronas y flores blancas, se instaló una pantalla que proyectó las imágenes que recordaron algunos de los trabajos de ‘La Corcholata’, así como una gran fotografía de Carmelita. Cercano al mediodía, se ofreció una misa en su honor encabezada por el sacerdote José de Jesús Aguilar.

Dentro de los planes de la familia de Carmen Salinas, se encuentra volver a la funeraria para que su cuerpo sea cremado y posteriormente trasladado al Panteón Español, en donde descansará en la capilla familiar junto a su hijo, Pedro Plascencia, quien falleció en 1994 tras un cáncer de pulmón.