El pasado jueves, durante un concierto de la boy band Mirror, una pantalla gigante se desprendió de su lugar y cayó encima de tres bailarines. Tras el fatal accidente, los heridos fueron trasladados a un hospital, sin embargo el estado de uno de ellos es crítico.
Según informes del diario South China Morning Post, uno de los bailarines se encuentra en terapia intensiva; su condición es grave y los pronósticos indican que podría quedar paralítico debido al impacto de la pantalla en su cuerpo. En relación con el segundo bailarín, ya fue dado de alta.
Así va el estado de salud de los bailarines de Mirror
Durante una presentación de la boy band en el Hong Kong Coliseum una de las pantallas cayó de varios metros de altura sobre el escenario. Al menos tres personas resultaron heridas en el incidente, sin embargo medios locales solo han informado el estado de dos.
Mo Lee Kai-yin, joven de 27 años, tiene un reporte delicado de salud, ya que corre el riesgo de perder la movilidad del cuello para abajo.
Según el South China, los médicos están agotando todos los recursos para lograr que el bailarín pueda volver a caminar.
El diagnóstico del joven indica que el impacto de la pantalla dislocó la tercera y cuarta sección de las cervicales de Lee, lo cual derivaría en una incapacidad para mover piernas y brazos. Además de esta afectación, órganos internos como los pulmones también se encuentran en condiciones delicadas.
Por otra parte, la cabeza de Mo es una de las áreas que requiere especial atención puesto que el objeto cayó de forma transversal en ella.
Tras ser ingresado de urgencia al hospital el jueves por la noche, Lee ingresó a quirófano para que le realizaran una cirugía de vértebras; al día siguiente regresó para que el personal médico le practicara un procedimiento quirúrgico cuya duración fue de más de ocho horas.
Si bien, los doctores consiguieron estabilizar su columna vertebral aún no hay indicios de mejoría. Debido a la gravedad de las heridas y de las cirugías el bailarín tuvo que ser intubado.
En relación con Chang Tsz-fung, de 29 años, el otro bailarín que resultó herido, ya fue dado de alta tras determinarse que sus lesiones no requerían más días de observación.
Según el periódico chino, supuestamente Chang tuvo una lesión leve en la cabeza cuyas consecuencias no implicaron más de un día de hospitalización.