En 2022, Bruce Willis fue diagnosticado con afasia, un padecimiento neurodegenerativo que con el paso de los meses avanzó y ahora se determinó que tiene demencia frontotemporal, por lo que se ha alejado de los reflectores y la vida pública.
Si bien su esposa e hijas han compartido en meses previos actualizaciones sobre el estado de salud del actor, fue ahora uno de sus amigos quien decidió compartir cómo ha vivido de cerca la enfermedad de Willis.
Amigo de Bruce Willis comparte cómo se encuentra el actor
Glenn Gordon Caron, productor de la serie ochentera Moonlighting (1985-1989), misma que protagonizó Bruce Willis con Cybill Shepherd, habló en una entrevista sobre dicha serie, que ahora se encuentra disponible en la plataforma Hulu.
Sin embargo, también habló sobre Bruce Willis, quien está feliz de que la producción ya esté en streaming, aunque ahora casi no puede expresarlo.
“El proceso (para llevar Moonlighting a Hulu) ha tomado bastante tiempo y la enfermedad de Bruce es una enfermedad progresiva, así que pude comunicarme con él, antes de que la enfermedad lo volviera tan incomunicativo como lo es ahora (…) Sé que significa mucho para él”, dijo el realizador.
Glenn Gordon intenta mantenerse cerca de Bruce Willis
De acuerdo con el creador de Moonlighting, el actor de 68 años es una persona muy optimista, aunque gracias a su enfermedad ha cambiado un poco su personalidad. No obstante, Gordon se ha mantenido al pendiente de Willis.
“Me he esforzado mucho por permanecer en su vida. Es una persona extraordinaria. Lo que hace que (su enfermedad) sea tan alucinante es que si alguna vez has pasado tiempo con Bruce Willis, no hay nadie que tenga más alegría de vivir que él. Amaba la vida y simplemente adoraba despertarse cada mañana y tratar de vivirla al máximo (…) pero la alegría de vivir se ha ido”, dijo.
Ahora, el actor no sale de su casa y platica poco. Aunque sí reconoce personas e incluso se muestra feliz de ver a sus allegados, Glenn Gordon dijo que ha perdido ciertas habilidades y pasiones, como la de hablar y la lectura.
“Mi sensación es que entre uno y tres minutos él sabe quién soy. Él no es totalmente verbal: Solía ser un lector voraz (no quería que nadie lo supiera) y ahora no lee. Todas esas habilidades lingüísticas ya no están disponibles para él y, sin embargo, sigue siendo Bruce”, expresó.