El fiscal general de Morelos, Uriel Carmona Gándara, advirtió que si la Fiscalía General de la República (FGR) gira una orden de aprehensión en su contra se convertirá en un ‘preso político’, ya que no ha cometido algún delito.
“No hay temor, no hay miedo. No hemos incurrido en ninguna conducta ilícita, el temor es de quién debe algo. La posibilidad (de detención) existe y, si eso ocurre me convertiré en preso político”, afirmó.
El martes, la Cámara de Diputados desechó una solicitud de juicio de procedencia en contra del fiscal al considerar que no tiene la inmunidad procesal que ofrece el artículo 111 de la Constitución Política.
El funcionario corre el riesgo de ser detenido por los presuntos delitos federales que se le imputan: delitos contra la salud, operaciones con recursos de procedencia ilícita, delincuencia organizada en su modalidad de terrorismo, acopio y tráfico de armas.
“La suspensión definitiva que es una sentencia que causó firmeza procesal, puesto que la autoridad responsable, en este caso, la Cámara de Diputados, no impugnó esa resolución y esta suspensión parte de la premisa de que el fiscal de Morelos sí cuenta con fuero”, manifestó.
Añadió que la determinación de los legisladores que ayer sesionaron para intentar “quitarle el fuero” es un desacato a un mandato federal.
“Entonces la resolución de la Cámara de Diputados es frontalmente contraria a la consideración de la suspensión definitiva, por ende es violatoria, lo que es consecutivo de un delito federal”, argumentó el fiscal y añadió que interpondrá una controversia.
Carmona Gándara aseveró en rueda de prensa que se defenderá él mismo: “Soy mi propio abogado”.
Afirmó que no ha incurrido en conducta ilícita alguna, como se le señaló en el pleno del Congreso federal por parte de diputados de Morena, y advirtió que enfrentará cualquier citatorio.
Agregó que recurrirá a todos los medios de defensa y que solo tiene dos cuentas bancarias, ya que entre los delitos que se le imputan del orden federal, está el delito de lavado de dinero.
“Yo solo tengo dos cuentas bancarias, una personal que es con la que trabajo en la Notaría número 6, de la cual soy titular desde 2014 y la cuenta de nómina de la fiscalía”, insistió.
Mencionó que tiene una respuesta de la Unidad de Investigación Financiera (UIF), en donde se le informa que no está dentro de la lista de personas investigadas por malos manejos de recursos o blanqueo de capitales, como sostuvieron legisladores de la la autollamada Cuarta Transformación, hecho que, dijo, podría utilizarse para persecución política.
Aseveró que no renunciará, como han pedido algunos abogados y actores políticos, porque está limpio y tiene la obligación de seguir al frente de la dependencia.