Luego del aumento en el número de contagios de COVID-19 en Baja California, la gobernadora Marina Del Pilar Ávila Olmeda, anunció el regreso de la entidad al semáforo epidemiológico naranja y adelantó la reducción de aforos.
No obstante aún no se determina a partir de qué día inician las restricciones que impone la nueva coloración. De acuerdo con la mandataria, después del análisis del Comité Científico de la Secretaría de Salud, los aforos deben bajar al 50 por ciento en espacios públicos, en un intento por disminuir significativamente las cadenas de transmisión.
La gobernadora destacó, en un mensaje a la población, que frente al arribo de la cuarta ola de la pandemia al Estado, y debido a las variantes del COVID-19 como ómicron que han arrojado cifras récord de contagios, superando más de mil casos activos nuevos diarios en promedio, es que se toma esta determinación.
”Es fundamental dejar en claro la importancia de la vacunación, ya que de acuerdo a datos científicos, una persona sin vacunar tiene mayor riesgo de contagiar a otras personas, además de que las camas de cuidados intensivos y los respiradores están ocupados justamente por personas que han decidido no vacunarse”, apuntó la mandataria estatal.
Otra de más medidas que implementará el gobierno del estado es la ampliación de los puntos de vacunación en la entidad.
En Tijuana se tienen previstos cuatro centros fijos de vacunación y en Tecate, Rosarito, Ensenada, el Valle de Mexicali, San Felipe y San Quintín, también se contará con un espacio permanente para reforzar la aplicación del biológico. A esto se suma la ampliación vespertina de los horarios de vacunación contra el COVID, mismos que también funcionarán los sábados y domingos en horario completo, con el objetivo de atender a la mayor cantidad de bajacalifornianos en condiciones de vacunarse.
Ávila Olmeda invitó a la población a estar pendiente de las distintas medidas que se anunciarán para combatir la pandemia. Agregó que su gobierno es consciente de la importancia de mantener las actividades económicas, ya que los ciudadanos requieren un sustento para vivir y desarrollarse con dignidad.