De los 6 millones de llantas que fabrica la empresa Brigestone Firestone cada año, recolecta entre 70 y 80 toneladas de neumáticos inservibles mediante la campaña Llantatón. Ello para evitar que se vuelvan agentes contaminantes o incluso nidos del mosco transmisor del dengue.
René Rico Rea, gerente de Seguridad y Medio Ambiente de Brigestone en Cuernavaca, explicó que ha sido un reto hacer conciencia en las personas de que no dejen las llantas en la vía pública o en las barrancas; tampoco quemarlas porque generan altos niveles de contaminantes.
“En Cuernavaca hemos hecho esta campaña desde hace ocho años, también lo pondrá en marcha nuestra planta en Monterrey, así como también en la de San José Poza Rica en Veracruz; cada año buscamos superar las 80 toneladas pues todavía falta mucho por hacer”, explicó.
Si bien los últimos dos años, la pandemia por COVID-19 provocó que el reciclaje de llantas fuera lento, este 2022 la empresa pretende contribuir en superar las 79 toneladas del 2021, actividad en la que Morelos es pionero, así como también dicha factoría.
Con esta recolección la empresa junta el mayor número de llantas que ya no se usan, para enviarlas a las cementeras y convertirlas en concreto y de esta forma proteger al medio ambiente y al ser humano.
“Una vez que recolectamos las llantas las enviamos a coprocesamiento, es decir, lo mandamos a Cementos Cruz Azul en dónde se aprovecha tanto la energía como el material; la transformación consiste en cortarlas a la dimensión apropiada, las inyectan en el horno, ya que además de calor, los metales que tiene la llanta forman parte del clinker del cemento”, detalló René Rico.
Y es que si las personas queman las llantas en lugar de mandarlas a un sitio de disposición final en el que les brinden el tratamiento indicado, provocan afectaciones al aire, al agua y a los ecosistemas. Pues el tiempo en que tarda la combustión aunado al riesgo que representa, genera monóxido de carbono, el cual es mortífero.
Por tanto, este año la llantera junto con la Secretaría de Desarrollo Sustentable y Ayuntamiento de Cuernavaca anunciaron la puesta en marcha de El Llantatón con el que buscan invitar a la ciudadanía y a las empresas a llevar sus neumáticos descompuestos al Parque Ecológico San Miguel Acapantzingo y así evitar que tapen coladeras, barrancas o en ríos.