Juan Pablo, el adolescente otomí de 14 años que fue quemado por dos compañeros de la telesecundaria, fue dado de alta este lunes del Hospital de Especialidades del Niño y la Mujer de Querétaro, donde se encontraba desde hace más de un mes por las quemaduras de segundo y tercer grado que sufrió tras la agresión
Juan Pablo salió caminando del hospital acompañado de su madre, Eugenia Eduardo Marcelino, así como del director del Hospital, Manuel Alcocer Alcocer.
Previo a su salida, Juan Zamorano, padre de Juan Pablo, informó que para el menor los daños físicos “ya fueron superados”, mientras que los psicológicos persisten, por lo que pidió el apoyo de las autoridades para seguir con su tratamiento.
El pasado 6 de junio de 2022, de acuerdo con testigos, Juan Pablo fue rociado con alcohol y quemado dentro del salón de clases por dos de sus compañeros de la telesecundaria ‘Josefa Vergara’, ubicada en la comunidad El Salitre, en Querétaro.
Eugenia Eduardo Marcelino, madre de la víctima, denunció que las autoridades educativas no le informaron de inmediato lo ocurrido y que fue la maestra de su hijo quien lo trasladó sola a una clínica para su atención médica, sin pedir una ambulancia para su valoración, o para trasladarlo a un hospital o dar parte a las autoridades de lo ocurrido.
Juan Zamorano, padre de Juan Pablo, revela que su hijo sufría bullying por parte de sus compañeros y maestra, por ser otomí y no hablar bien español.
“Nos dimos cuenta que hasta la propia maestra le hacía bullying, nada más porque somos de raza otomí, piensa ella que no somos de su clase, no somos de su raza, piensa que ella es ser humano y nosotros somos de otras personas”, denunció.
Denuncias contra los atacantes
El pasado 7 de junio, la Fiscalía del Estado inició una carpeta de investigación por la denuncia presentada por los padres del menor agredido. Ante ello, las autoridades educativas dieron de baja a los dos menores acusados.
El pasado 24 de junio, un Juez de Control vinculó a proceso a los dos menores agresores por el delito de lesiones dolosas. En tanto, la maestra del menor quemado fue suspendida tras los hechos.
Sin embargo, la maestra sigue sujeta a investigación por parte de la Fiscalía del Estado y por el Órgano Interno de Control de la Unidad de Servicios para la Educación Básica en el Estado de Querétaro (USEBEQ).
Los padres del menor agredido dijeron temer por su seguridad, ya que en la Telesecundaria aparecieron varias mantas de apoyo a la maestra, las cuales fueron colocadas por otros docentes.
En las mantas, se señala que los profesores ‘han sido lastimados con la investigación y señalamiento de responsabilidad’ hacia la docente.
De igual manera, los padres de Juanito han visto deambular en la calle -con encendedor en mano y comprando cervezas-, a los dos menores que quemaron a su hijo, sin las medidas cautelares que les impuso el Juez de Control a la hora de vincularlos a proceso por el delito de lesiones dolosas.
Juan Zamorano dio a conocer que su hijo Juan Pablo, así como sus hijas, no regresarán a la escuela en la que estudiaban en la comunidad El Salitre.
Agregó que ya cuentan con otro domicilio para lo cual recibirán apoyo económico del gobierno estatal para el pago de la renta; sin embargo, afirmó que no se sienten seguros de vivir en la zona.
En tanto, la secretaria de Salud, Martina Pérez Rendón, reveló que a Juan Pablo se le hicieron algunos injertos de piel en las zonas donde registró mayores quemaduras.
“No se espera ninguna secuela más que la cicatriz que obviamente va a quedar, pero nada que limite la movilidad o la funcionalidad de sus extremidades”, detalló.
Por otra parte, Manuel Alcocer Alcocer, director del Hospital de Especialidades del Niño y la Mujer, apuntó que el alta definitiva de Juan Pablo tomará entre dos y tres meses por el tratamiento físico.