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Paramédico era buscado desde junio; encuentran su cuerpo en basurero de Tabasco

Carlos Alfredo Potenciano fue encontrado en un basurero que quedaba en el camino que usaba para trabajar en la Cruz Roja.

Carlos Alfredo Potenciano desapareció después de salir de su guardia en junio. (M. Albert Hernández)

Tabasco.- Carlos Alfredo Potenciano era paramédico de la Cruz Roja en Villahermosa, pero desde el pasado 9 de junio era buscado por familiares y amigos porque tras salir de su turno de guardia no volvió a casa.

Sus conocidos no dejaron de buscarlo y exigir a las autoridades esclarecer el caso. El pasado 14 de junio incluso marcharon por las calles de la ciudad y se plantaron frente a Palacio de Gobierno para pedir su pronta aparición.

Este viernes se dio a conocer la detención de un sujeto considerado como uno de los responsables de arrebatarle la vida al joven. Este confesó dónde se localizaba el cuerpo, que fue encontrado en un basurero en la carretera Villahermosa - Teapa, es decir, en el mismo camino que usaba todos los días.

El sujeto cometió el crimen para robarle a Carlos Potenciano la motocicleta que usaba a diario para trasladarse de su vivienda al trabajo y viceversa.

Los reportes preliminares indican que fue asesinado a golpes, aunque el detenido portaba un arma de fuego cuando fue puesto a disposición de las autoridades.

En su momento, el señor Reyes Potenciano Domínguez, quien es el padre del paramédico declaró que las autoridades fueron lentas para localizar a su hijo.


La última vez que se le vio salió de la base de la Cruz Roja Mexicana ubicada en la avenida César Sandino.

Violencia contra pasantes de medicina

Apenas el fin de semana fue asesinado Erick Andrade Ramírez, médico pasante, en el municipio de Pueblo Nuevo, Durango.

Tras el asesinato del médico pasante no sólo se retiraron los pasantes de los hospitales de riesgo, también se dio una ola de renuncias entre el personal de salud de dicha clínica, que presenció el homicidio del joven.

Entre médicos, enfermeras y personal de intendencia, suman seis personas que desertaron de su trabajo en el hospital, debido a las secuelas emocionales que les causó el crimen.

Con información de Martha Casas.

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