La madrugada del pasado 15 de septiembre, Fermín Hedel Guzmán Martínez, sobrino del narcotraficante Joaquín “el Chapo” Guzmán Loera, murió abatido a tiros cuando se encontraba en un baile para conmemorar las fiestas patrias, en el poblado de Guadalupe y Calvo, en Chihuahua.
El agresor fue identificado como Ubaldino C.V., con quien minutos antes tuvo un altercado. El sujeto fue remitido a la prisión de Aquiles Serdán, localidad conurbada a la capital de Chihuahua, donde un juez le impuso prisión preventiva por un año, tras vincularlo a proceso por el delito de homicidio calificado.
Las primeras investigaciones arrojaron que aproximadamente las 02:25 horas, en la plaza Donato Guerra, de dicha población, Ubaldino C. V. disparó en varias ocasiones y sin motivo aparente, en contra de Fermín Hedel.
Los disparos los recibió a corta distancia en la zona torácica, por lo que la víctima perdió la vida de manera instantánea.
La detención del agresor ocurrió casi de inmediato, por agentes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
Fermín Hedel, a quien apodaban “El Cuñado”, tenía su residencia en Badiraguato, Sinaloa, población que se encuentra en los límites con los estados de Sinaloa, Durango y Chihuahua, área conocida como el triángulo dorado.
Ese día acudió a la vecina localidad de Guadalupe y Calvo, en territorio chihuahuense, para pasar un rato de diversión. Pero al calor de las copas surgió una discusión, que concluyó trágicamente con su vida, a manos de Ubaldino.