Murales de alto valor histórico en la zona arqueológica de El Tajín, en Veracruz, fueron quemados por sujetos desconocidos durante la madrugada de este miércoles 21 de diciembre.
Los murales se encontraban dentro del edificio I de la zona arqueológica totonaca, y sujetos que no fueron identificados habrían provocado el incendio que generó daños que ya no podrán ser reparados.
En un comunicado, el Sindicato Nacional del Instituto Nacional de Antropología e Historia señala que habrían ingresado al lugar y quemado los murales que estaban cubiertos por un plástico, en un sitio protegido por la Guardia Nacional.
“Desaprobamos tajantemente los hechos vandálicos ocurridos en la zona arqueológica de El Tajín en el estado de Veracruz, que causaron daños irreversibles en la pintura mural, herencia cultural de la humanidad. Exigimos a las autoridades del INAH y del gobierno federal que realicen las investigaciones necesarias para hallar a los responsables y para que se imparta la justicia”, indica el documento.
Los murales miden aproximadamente 30 metros y fueron registrados como un bien cultural por la Unesco, ya que habían sido plasmados entre los años 800 y 1200 por la cultura totonaca que habitaba la zona.
El plástico que cubría las obras fue derretido por el fuego y quedó impregnado en las mismas.
Aunque el sitio arqueológico está resguardado por la Guardia Nacional desde junio pasado; sin embargo, pese a la presencia de las fuerzas federales, los responsables del crimen arqueológico no fueron detectados.
Estas son las multas por invadir zonas arqueológicas
Según el daño ocasionado al patrimonio cultural del país, las sanciones pueden ir de tres y hasta diez años de cárcel.
El artículo 47 de la Ley Federal Sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos menciona que aquella persona que realice trabajos materiales de exploración arqueológica, por excavación, remoción o por cualquier otro medio, en monumentos arqueológicos inmuebles, o en zonas de monumentos arqueológicos, sin la autorización del Instituto Nacional de Antropología e Historia, se le impondrá prisión de tres a diez años y de mil a tres mil días multa.
De igual manera, el artículo 52 señala que las personas que alteren o destruyan un monumento arqueológico, artístico o histórico, se le impondrá prisión de tres a diez años y multa hasta por el valor del daño causado.