La emblemática playa de Balandra, en Baja California Sur, es el centro de atención luego de un accidente esta semana: una embarcación turística embistió a dos mujeres que practicaban buceo en esta zona, que es una Área Natural Protegida (ANP).
El accidente en Balandra demuestra las problemáticas por la falta de regulación de tránsito marítimo en el Área Protección de Flora y Fauna (APFF).
¿Qué pasó en Balandra?
De acuerdo con la relatoría de hechos, el incidente se registró el 25 de abril alrededor del mediodía, sin embargo, no se hizo del conocimiento público hasta este fin de semana.
Testigos exponen que la embarcación turística entró a exceso de velocidad al Área Natural Protegida. Aunque las víctimas hicieron señas y gritaron, nada detuvo a la unidad que las arrolló en el mar.
Se sabe que las dos mujeres resultaron lesionadas. Una de ellas, identificada como Alexandra “N”, está herida de gravedad e incluso hay campañas en redes sociales en estos momentos para conseguir sangre tipo A+ para las intervenciones quirúrgicas que requiere.
Exponen que la embarcación que lleva el nombre “San Miguel III” de la empresa San Miguel, se retiró del lugar sin brindar apoyo a las víctimas. Posteriormente, personas a bordo de otra unidad naviera se acercó a la zona del siniestro para auxiliarlas.
El hecho de que la embarcación San Miguel III entrara a zonas de Balandra a exceso de velocidad ya viola el reglamento de navegación establecido para la convivencia y manejo del ANP.
La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) ocultó el hecho por casi tres días hasta que familiares y amigos de las dos mujeres afectadas expusieron lo sucedido en redes sociales; tampoco ha emitido un boletín al respecto.
Accidentes en la zona protegida de Balandra
No es la primera vez que se registran siniestros relacionados con la falta de regulación en la playa que atrae a miles de turistas al año.
En agosto de 2022, el yate “Fortius” se incendió y derramó combustible en Balandra, esto mientras se encontraba en zonas donde está prohibida la navegación marítima.
El ecocidio en Balandra fue noticia internacional, permaneció cerrada por dos meses. Ahora, la ausencia de control en el manejo de la playa vuelve a poner en el foco de atención a la APFF.
Amigos de las víctimas han denunciado que la empresa propietaria de la embarcación se ha negado a responsabilizarse de las lesiones, lo que ha desatado la protesta ciudadana en redes sociales para exigir a las autoridades que hagan justicia y que dé una vez por todas regulen el tránsito marítimo en Balandra.