SAN FERNANDO, Tam.- Los cuerpos sin vida y con señas de tortura de seis hombres fueron abandonados en la carretera Reynosa-San Fernando, a la altura del Ejido Plan de Alazán, informó la Vocería de Seguridad Pública de Tamaulipas.
Poco antes de las 9:00 de la mañana de este viernes, un reporte ciudadano alertó a las autoridades que atendieron el llamado, confirmando que en dicha vía federal se encontraban los cuerpos de seis hombres.
Las víctimas fueron halladas con las manos atadas y presentaban huellas de tortura, además de impactos de armas de fuego, por lo que policías de investigación, peritos acudieron al lugar para recabar evidencias, mientras personal del Semefo trasladó los cuerpos para su necropsia y tratar de identificarlos.
Atacan a elementos de la Guardia Estatal con drones y explosivos
Horas antes del hallazgo de los cuerpos, elementos de la Guardia Estatal fueron agredidos por delincuentes que utilizaron drones con explosivos que afectaron una de las patrullas, mientras los elementos presentaron heridas, pero no de gravedad, de acuerdo con la Vocería de Seguridad.
La dependencia informó que el ataque se reportó a las 5:15 horas de este viernes, cuando los efectivos estatales realizaban recorridos de seguridad y vigilancia en el Ejido Vicente Guerrero de Reynosa.
“Elementos de la Guardia Estatal reportaron estar siendo agredidos con aparatos eléctricos (Drones), los cuales transportaban artefactos explosivos. Un vehículo táctico resultó dañado. Los elementos no presentaron heridas de gravedad”, confirmó la Vocería y agregó que en la zona se llevó a cabo un patrullaje sin que se lograra ubicar a los agresores.
En esta zona del Valle de San Fernando dos facciones del Cártel del Golfo, (Metros y Escorpiones) se han enfrentado por el control de la zona para sus actividades delictivas.
El pasado 19 de noviembre los ataques cobraron la vida de tres elementos de la Guardia Estatal; por la mañana los efectivos fueron emboscados en la carretera federal 101 a la altura del ejido Tres palos y Las Norias.
Los delincuentes lograron despojar de la patrulla a los elementos estatales, uno de los policías perdió la vida en el lugar, mientras otro falleció cuando era trasladado para su atención médica en un hospital. En el intercambio de disparos, tres de los agresores fueron abatidos.
Ya por la noche, un comando armado atacó a los efectivos de la Guardia Estatal, trasladaba a uno de los dos elementos caídos durante la mañana al municipio de Burgos de donde era originario.
Al repeler la agresión lograron reducir a uno de los pistoleros; sin embargo, una oficial de la Guardia Estatal perdió la vida y cinco de sus compañeros resultaron heridos.